Tras un primer semestre en negativo, durante el tercer trimestre del 2024 se empieza a evidenciar una tendencia positiva en la salida de automóviles livianos, lo que se explica por un mejor desempeño de la demanda interna y por el ligero repunte de algunas variables del mercado. Sin embargo, el mayor dinamismo dentro del rubro automotriz peruano se observa principalmente en la gama alta, a raíz de las mejores opciones de financiamiento.
El BBVA reporta que los créditos vehiculares para segmentos de gama alta en el Perú se incrementaron 18% durante el primer semestre del 2024, en comparación con el mismo periodo del 2023. Julio Anaya, gerente comercial de Crédito Vehicular y Floor Plan de la citada entidad, señala que, del total de créditos del rubro automotriz que facturan, el 20% se compone por créditos de US$ 25,000 a más. La entidad ofrece productos para financiar el 100% del artículo, ya sea nuevo o seminuevo, de marcas como BMW, Mercedes-Benz, Audi, Mini, Porsche, Volvo, Lexus, Bentley, Land Rover o Maserati, entre otras.
En Banbif los créditos para autos premium representan el 11% de su cartera, afirma Mónica Chávez Ciurlizza, su subgerente de Productos Consumo. “Es un segmento que permanece en crecimiento a base de una atención preferente, el financiamiento del 100% del vehículo y plazos de hasta 72 meses”, precisa.
La cantidad de clientes que financian modelos de gama alta a través de la compra colectiva también se mantiene al alza, indica Milagros Ward, subgerente de Marketing de Pandero, quien recomienda adquirir dos o tres certificados por el valor de hasta US$ 30,000 cada uno, para así calzar con el costo del producto. Añade que, en general, los requisitos para acceder a estos financiamientos son similares a otros créditos: contar con ingresos que aseguren la capacidad de pago de las cuotas y tener un buen score crediticio.
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A plazos
Los concesionarios de autos también han buscado estrategias para facilitar la adquisición. Gonzalo Flechelle, gerente de Porsche Perú, manifiesta que cuentan con alianzas con las más importantes instituciones bursátiles del país, lo que les permite brindar diversas opciones de financiamiento diseñadas para adaptarse a las necesidades y expectativas de los usuarios, siempre con tasas competitivas y plazos flexibles.
“Si bien el 80% de nuestras ventas corresponde a compras al contado, también vemos un crecimiento del número de clientes que busca aprovechar los beneficios del financiamiento a plazos, el principal de los cuales es poder disfrutar de sus vehículos sin comprometer su liquidez inmediata”, sostiene.
Audi también trabaja alianzas estratégicas con las instituciones bancarias para que sus clientes cuenten con productos financieros exclusivos: 30% de sus colocaciones se hace por medio de estos convenios.
En el caso de Toyota, se alió con la financiera MAF para crear el programa Toyota Life, a través del cual se realiza más del 25% de sus operaciones. La diferencia es el pago al contado, que suele cubrirse con un préstamo personal o el de algún familiar.
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Seguros de gama alta
En este aspecto, el segmento de gama alta también presenta buenas oportunidades. José Garnica, gerente de Seguros Vehiculares en Pacífico Seguros, dice que, si bien el mercado para estos automóviles ha ido evolucionando a un ritmo consistente desde la pandemia, incluso positivamente en SUV y todoterrenos, existe aún campo para crecer tanto en penetración como en propuesta de valor.
“En el segmento de gama alta, por ejemplo, no nos limitamos únicamente al producto de Todo Riesgo (que es nuestro seguro más completo en cuanto a cobertura y servicios) y seguimos trabajando en la búsqueda de nuevos productos y servicios para ellos, considerando las particularidades que puedan requerir. Nuestro diferencial es el nivel world class en las atenciones de siniestros de autos, a un precio sumamente competitivo”, declara.
Con igual perspectiva, Giancarlo Díaz, vicepresidente de Seguros de Vehículos y P&C de Rimac, revela que están trabajando con especial atención el mercado de modelos premium, que se ha ampliado de manera constante. “En los últimos tres años, la demanda de seguros vehiculares ha aumentado en promedio 4%, pero la del segmento premium lo ha hecho a un ritmo mayor, impulsada principalmente por una mayor conciencia sobre la importancia de asegurar estos activos, el incremento en los costos de reparación y repuestos, y la innovación en productos por parte de las aseguradoras con su oferta de artículos y servicios personalizados y flexibles”, detalla.
Entre los servicios adicionales al Todo Riesgo que se brindan en los seguros premium figuran asistencia legal, carro de reemplazo, talleres especializados, cobertura de accesorios especiales y musicales, reposición de lunas, y descuentos en el precio por buen historial de manejo y por la instalación de dispositivos de seguridad.
Díaz agrega que, aunque exista este dinamismo, el segmento sigue en crecimiento en comparación con otros mercados y muestra una proyección interesante para los próximos años. “Actualmente, el 8% de nuestra cartera de seguros vehiculares corresponde a las gamas alta y media”, anota.
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