Los dos principales poderes del Estado —el Ejecutivo y el Legislativo— han llegado a un claro acuerdo: sobrevivir, a como dé lugar, los próximos 36 meses, ignorando desdeñosamente el sentir popular que en las calles y las encuestas nos piden (me incluyo) “que nos vayamos todos”. Se trata de un acuerdo tácito, revelado sutilmente por los vigorosos aplausos de las bancadas de derecha, centro e izquierda cuando la presidenta en ejercicio, Dina Boluarte, hizo referencia al 2026 como fecha de culminación de su gobierno, durante el discurso por el aniversario patrio.