Es seguro suponer que, en gran parte del mundo, se han contabilizado –y seguirán contabilizándose– menos muertes por COVID que las reales. (Photo by MAURO PIMENTEL / AFP)
Es seguro suponer que, en gran parte del mundo, se han contabilizado –y seguirán contabilizándose– menos muertes por COVID que las reales. (Photo by MAURO PIMENTEL / AFP)

Los últimos 18 meses han demostrado que contabilizar con precisión a los muertos es vital para proteger a los vivos. Al comienzo de la pandemia, muchos países carecían de sistemas de registro adecuados mientras que otros veían cómo sus procesos colapsaban bajo la presión.

TAGS RELACIONADOS