En los meses siguientes se espera una apertura progresiva de los negocios debido a la pandemia del coronavirus y, con ello, cambios en la manera que operen, lleguen a sus clientes y traten de mantener sus ingresos. Manuel Carpio, profesor de Pacífico Business School, nos comenta sobre el rol que juega el Supply Chain Management para las empresas en este momento.
Distribución e información
A raíz de la crisis, según Carpio, las empresas enfrentarán una problemática con respecto a la información y distribución del producto.
En cuanto a la información, debido a las posibles nuevas medidas sanitarias y el hecho que las personas eviten ir a los establecimientos a armar su propia canasta de productos, las empresas ahora deben mejorar el levantamiento de información para saber qué requieren sus clientes.
Las empresas deben implementar un mecanismo para recopilar las necesidades y luego generar las propuestas a través de ello. Por ejemplo, van a tener que incurrir en implementar o mejorar sus plataformas virtuales en donde la logística sería especializada y habría un constante levantamiento de información.
“Antes no era muy necesario, pues las personas se acercaban al establecimiento y escogían lo que necesitaban. Ahora las empresas tienen un desafío para capturar la información y generar valor”, indicó.
En cuanto a la distribución, sugiere un gran desafío en cuanto a rapidez y costos, pues ahora serán muchas las personas que requerirán que los productos sean llevados a casa.
Esta complejidad aumenta cuando es el caso de zonas geográficas en donde es difícil el acceso. Ante ello, negocios como por ejemplo Rappi y Glovo, se presentarían como una oportunidad para abastecer a la demanda en este tipo de zonas.
Asimismo, se van a tener que generar más centros descentralizados y pequeños centros de distribución para atender la demanda, señaló Carpio.
Estas necesidades, han generado más emprendimientos dirigidos a captar la información del cliente y llevar el producto hacia este.
Relación con los proveedores
Los proveedores, según Carpio, juegan un rol importante dentro de la cadena de suministros y más aún en esta situación. Es idóneo que se refuerce la relación que la empresa tiene con su proveedor e incluso se convierta en una sociedad estratégica.
El que exista una sociedad, le permite a la empresa compartir información y sus objetivos con los proveedores de manera abierta. Esto trae consigo que se llegue al cliente de manera ágil e incluso más barata, y que la compañía tenga más tiempo para ocuparse de los temas relacionados a su producción.
Por ejemplo, en el caso de un proveedor de distribución (el cual trabaja con muchas marcas), si logra que la empresa tenga una relación con este agente (proveedor), entonces lo más probable es que exista prioridad al distribuir su producto, ya que ahora está identificado con el negocio, comentó Carpio.
“Si existe una sociedad, los proveedores compran la misión de la empresa y se sienten completamente parte de la operación. Esto permite a las compañías gestionar mejor su logística y ventas”, indicó.
¿Y las empresas que no puedan adaptarse?
Según Carpio, el paso lógico de las empresas ante la coyuntura es incurrir en esta mejora logística; sin embargo, habrán casos en donde muchos negocios no lo hagan por tema de recursos o desconocimiento en lo que hay que hacer.
Una situación de este tipo mostraría poca adaptabilidad a la coyuntura y comprometería el futuro de las operaciones de la compañía.
“Las empresas que no sean capaces de adaptar su cadena de suministros y logística a este nuevo entorno son empresas que no van a poder sobrevivir. Por el contrario, las que sí puedan, tendrán la oportunidad de capitalizar esta crisis”, indicó.
¿Se mantendrá en el tiempo?
La crisis del Covid-19 va a marcar un antes y un después en la logística y en la gestión de cadena de suministros en las que incurren las empresas.
Según Carpio, dado que las personas van a querer exponerse al menor riesgo posible, habría un cambio en los hábitos de consumo, los cuales posteriormente se mantendrían incluso cuando la situación se restablezca o haya seguridad en cuanto a salud se refiere.
A manera de ejemplo, hoy en día se está haciendo uso de plataformas virtuales para dar clases, cuando antes de la crisis no se confiaba en esta opción. Es posible que esta modalidad se mantenga junto con la presencial, cuando pase la coyuntura actual, comentó Carpio.
“Hay situaciones que la crisis ha forzado y que es muy probable que se mantengan. Viviremos de manera distinta luego de esto”, subrayó.