A poco más de un mes del inicio de las obras de construcción del nuevo puente vehicular Arica y de los trabajos de rehabilitación del puente Quebrada Seca en la Panamericana Sur (en Lurín), ambas obras caminan a paso acelerado ante la proximidad de la temporada de verano, informó la Municipalidad de Lima.
En el caso de la construcción del Nuevo Puente Vehicular Arica, ubicado a la altura del Km. 35 de la Panamericana Sur en Lurín, esta estructura reemplazará a la actual que data de 1966, y cumplirá con las actuales normas vigentes para edificaciones, que serán culminadas en febrero del 2018.
Jaime Villafuerte, gerente Promoción de la Inversión Privada de la MML precisó que las obras contemplan, la construcción de dos puentes gemelos, con sus plataformas correspondientes, uno por cada sentido de circulación. Este nuevo diseño será capaz de soportar la carga vehicular de la Antigua Panamericana Sur y la alta sismicidad de la zona.
Como parte de los trabajos, el nuevo puente tendrá dos vanos, cada uno de 25.5m de luz. Tendrá un ancho de plataforma de 12.45 metros, incluyendo veredas, bermas y barreras de protección, el cual es mayor a los 6 metros de ancho del puente actual. Esto permitirá al puente estar preparado para albergar dos carriles de 3.60m, dos bermas de 1.50m y pasarelas peatonales.
Según la configuración estructural, este puente es del tipo mixto, con tableros de concreto armado (plataformas), que se apoyarán sobre vigas de acero, los cuales estarán apoyados sobre estribos de pilotes de concreto armado. El proyecto contempla, además, 28 vigas de acero estructural, 14 para cada puente, teniendo cada una de ellas 25 metros de largo, aproximadamente.
Rehabilitación Puente QuebradaEn tanto los trabajos de rehabilitación del puente vehicular Quebrada Seca, ubicado a la altura del Km. 40.2 de la Panamericana Sur en el distrito de Punta Hermosa y permitirá ampliar a esa importante vía hasta en tres carriles. Para los peatones se habilitará un puente peatonal provisional.
Los trabajos contemplan la construcción de una estructura con dos puentes independientes, uno en cada sentido (sur y norte). Este nuevo diseño estará acorde con las normas actuales y será capaz de soportar la carga vehicular de la Panamericana Sur y la alta sismicidad de la zona.
El nuevo puente tendrá un ancho de 12,8 metros, incluyendo bermas y barreras de protección. Cabe precisar que esta construcción es mayor al ancho de la vía actual que es de 8 metros, lo que permitirá al puente estar preparado para albergar tres carriles, tal como es la proyección de la Panamericana Sur en este tramo.
Ambas estructuras contarán con dispositivos de control sísmico de manera que, en un evento extremo, esté garantizada la estabilidad y la seguridad de la superestructura.