Las entidades bancarias normalmente pueden elevar en cualquier momento la tasa de interés de las tarjetas de crédito que un usuario puede tener para realizar sus consumos. Sin embargo, también pueden reducir esa tasa, señala Edmundo Lizarzaburu, profesor de la carrera de Administración y Finanzas de la Universidad ESAN.
En diálogo con Gestión.pe, indica que cuando se firma el contrato entre el usuario y el banco para la entrega de la tarjeta de crédito, se específica la tasa de interés, así como su posible variación en el transcurso de su uso.
Para ello, agrega, la entidad bancaria debe informar al usuario sobre ese cambio con meses de anticipación.
“En el contrato se especifica que hay esta posibilidad de aumento de la tasa de interés, pero ocurre que el ciudadano por diversas variables no termina de leer a detalle el contrato”, indicó.
Agregó que las tasas de interés están en función al tipo producto, pues además de las tarjetas de crédito, también se otorgan créditos para compra de deuda, crédito de consumo o disposición en efectivo).
De igual manera, estas tasas están sujetas al riesgo del cliente, razón por la cual la entidad financiera no puede subir o bajar la tasa de interés de un mes a otro.
El historial
Así, el docente dijo que si bien se puede elevar esta tasa de interés, también se puede reducir. ¿En qué casos se puedan dar?
Según indica, la reducción de tasa de interés está en función a la competencia. Explica que si hay un cliente que paga puntualmente sus cuotas, normalmente otros bancos empiezan a otorgar a este cliente menores costos financieros porque el cliente es menos riesgoso.
“La tasa de interés tiene una relación con el riesgo, a mayor riesgo mayor tasa de interés. Pero si el tarjetahabiente tiene una buena efectividad de pago, un buen comportamiento de pago, las posibilidades de que la tasa puede bajar están mucho más latente, frente a otras personas que pagan siempre el monto mínimo, por ejemplo”, explicó.
De este modo, dijo que la reducción depende del historial crediticio de cada tarjetahabiente, en tanto los usuarios pueden ver su calificación crediticia en las Centrales de Riesgo.
Otros factores
El docente precisó que partiendo que en el sistema financiero existen varios productos (tarjeta de crédito, compra de deuda o disposición de efectivo), no todas tienen la misma tasa de interés.
Así, dijo que la tasa de interés para disposición de efectivo siempre es más alta (por encima de 99%), las tasas por tarjeta de crédito se ubican en 52% -según el reporte de la SBS-; mientras que las tasas de interés por compra de duda varían entre 10% y 15%.
De igual manera, las tarjetas de crédito varían de acuerdo a la categoría (Clásica, Oro o Black).
“Cuando la tarjeta sube de categoría aumentan los beneficios y normalmente se reduce la tasa de interés. Hay entidades que tienen tasa de interés que van entre 30% y 35%, hay otras que van entre 50% y 70%”, apuntó.