Hasta mediados de julio, más de 3.7 millones de afiliados al Sistema Privado de Pensiones optaron por el retiro del 25% de sus aportes a las AFP, lo cual sumó un total de S/ 19,246 millones del fondo administrado por las gestoras.
Una parte de los fondos retirados se destinó a cubrir deficiencias de las familias de algunos afiliados que han perdido el empleo, dijo Arturo García, docente de Esan.
“Sin embargo, otro grupo dispuso de su dinero para tenerlo depositado en el banco en un escenario en que los bancos han bajado fuertemente sus tasas de interés”, sostuvo.
La tasa promedio anual de la banca para las cuentas de ahorro es de 0.18%, mientras que la de los depósitos a plazo, a más de 360 días, apenas alcanza los 2.38%, de acuerdo con datos de la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS).
Asimismo, el mercado bursátil se ha recuperado a mayor velocidad que lo esperado lo que, a su vez, favoreció los activos financieros que forman parte de los portafolios de inversión de los fondos de las gestoras previsionales, señaló.
Por tanto, manifestó que el primer gran error lo cometieron quienes retiraron sus ahorros para la jubilación con el objetivo de ponerlos en el banco y hasta la fecha no los utilizan.
Si bien están a la espera de una oportunidad de inversión, hubieran tenido un mejor resultado si decidían dejar su dinero en el fondo, aseveró.
Indicó que los fondos de AFP han registrado rendimientos cercanos al 6%, cifra superior al retorno ofrecido por los productos bancarios.
En la misma línea, el segundo error observado entre algunos afiliados es la disposición de parte de sus fondos para gastos innecesarios como la compra de artículos de tecnología, refirió García.
Incluso, la ministra del Trabajo de Chile recomendó a los ciudadanos del país vecino, que solicitaron el retiro del 10% de sus fondos de AFP, utilizar esos recursos en productos de primera necesidad y no imitar el comportamiento reflejado en países como Perú, en que “se veía gente saliendo con plasmas de las tiendas”.
Según el especialista, aquellos que decidieron utilizar su dinero en la adquisición de bienes superfluos, deben ser conscientes que están sacrificando una pensión futura por un gasto actual.