
La Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) presentó su propuesta para ampliar el número de participantes en el sandbox regulatorio, que hasta ahora solo acoge a entidades bajo su supervisión.
De este modo, plantea incluir a fintech, startups, cooperativas de ahorro y crédito (coopac) y asociaciones de fondos regionales o provinciales contra accidentes de tránsito (afocat).
Estas empresas desarrollan modelos de negocios innovadores, orientados a atender segmentos tradicionalmente desatendidos, como son las personas que están fuera del mercado formal o aquellas que quedaron fuera por algún incumplimiento en el pago de sus obligaciones.
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Las fintech serían las primeras en querer formar parte del sandbox, porque muchas de estas no estaban de acuerdo con que este espacio se limite solo a empresas supervisadas o con autorización de organización, dijo a Gestión Luis Ernesto Marin, socio de Rubio Leguía Normand.
“En particular, las fintech de préstamos que tienen amplia presencia en el país, podrían buscar una flexibilización de la regulación, en la medida en que demuestren el funcionamiento adecuado de su producto. Asimismo, las fintech extranjeras con un representante en Perú podrían participar y traer al país modelos novedosos”, comentó.
Se genera también un espacio para que las insurtech puedan incrementar la penetración de los seguros que hoy es muy baja pese a los esfuerzos que vienen haciendo las aseguradoras, agregó.
El sandbox regulatorio es una herramienta que permite a los reguladores brindar flexibilidad a las empresas para probar, en un entorno controlado, nuevos productos o servicios financieros. De esta forma, el regulador puede monitorear las oportunidades y riesgos asociados a dichas innovaciones; y, al mismo tiempo, se facilita su ingreso al mercado con más agilidad.
Dicho reglamento resultaría aplicable a las empresas no supervisadas por la superintendencia que deseen implementar y desarrollar modelos novedosos en el ámbito de las operaciones financieras que se encuentran monitoreadas por el regulador. Para ello, deberán cumplir con los requisitos establecidos y obtener la autorización correspondiente para participar en la prueba piloto.

Plazo
Marin destacó como otro punto positivo que la SBS proponga extender el periodo máximo del piloto -que actualmente es de 24 meses- a 30 meses (duración máxima de 18 meses con posibilidad de ser renovado por 12 meses adicionales).
Según el proyecto del regulador, las empresas autorizadas a participar del sandbox de la SBS deberán iniciar su piloto dentro de un plazo máximo de seis meses contados desde la emisión de la resolución.
El proyecto también establece requisitos específicos para las entidades no supervisadas que deseen participar en el sandbox, tales como acreditar su formalidad legal, presentar un estudio de factibilidad técnica y financiera, demostrar la idoneidad moral de sus representantes y acreditar recursos humanos, tecnológicos y financieros suficientes.
El superintendente de la SBS, Sergio Espinosa, había indicado a Gestión que este mes se modificaría el sandbox regulatorio para incluir a más participantes.
La SBS también difundirá la relación de empresas aprobadas y una descripción general de los desarrollos innovadores en evaluación. Compartirá además información sobre los resultados obtenidos.
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Economista de la Universidad de Piura. Actualmente se desempeña como redactor de Finanzas en Diario Gestión.