Los depósitos del sistema financiero, que crecieron con fuerza en el 2020, comienzan a disminuir.
Al cierre de octubre, los depósitos en entidades financieras totalizaron S/ 333,080 millones, según datos del Banco Central de Reserva (BCR). Dicho monto representa una caída de 0.8% respecto al mismo periodo del año pasado.
Esa fue su segunda merma consecutiva, pues ya a setiembre estos depósitos habían retrocedido 0.1% anual. Incluso desde abril era clara su desaceleración (ver gráfico).
Varias razones explican este comportamiento del ahorro de personas y empresas, señalaron expertos consultados por Gestión.
Por un lado, en un contexto de reapertura de las actividades económicas, tras las medidas para controlar la pandemia, se está percibiendo un mayor uso de los recursos ahorrados para consumo e inversión, sostuvo Mario Guerrero, subgerente de Estudios Económicos de Scotiabank.
Poder adquisitivo
Eso se alinea a la aceleración del consumo privado (12.8%) e inversión privada (13.2%) en el tercer trimestre, comparado con igual periodo del 2019, indicó.
Asimismo, algunas familias ahora están echando mano de sus excedentes en el sistema financiero para compensar la pérdida de poder adquisitivo causado por el deterioro del mercado laboral y la inflación, añadió.
Walter Leyva, docente de posgrado de ESAN, refirió que el decrecimiento de los depósitos también se explica por la incertidumbre respecto de las políticas del nuevo gobierno. “Se ha visto que muchos clientes, principalmente del sistema bancario, han trasladado sus ahorros a bancos o filiales internacionales”, sostuvo.
Productos
Otro factor que tiene gran impacto en la caída de los depósitos es la disposición de hasta el 100% de las cuentas CTS que aprobó el Congreso y que está vigente hasta 31 de diciembre de este año, mencionaron los entrevistados.
Los saldos de las cuentas CTS bajaron 36% anual a octubre, según el BCR. “Todavía hay incertidumbre sobre si se verán más retiros de estos fondos de acá hasta fin de año”, dijo Leyva.
Los depósitos a la vista, otro producto de ahorro más vinculado a las empresas, también registraron una contracción anual de 4.8% al término del décimo mes del 2021. Guerrero consideró que probablemente se estén destinando esos fondos a cubrir necesidades de capital de trabajo o un mayor costo de insumos.
Además, los fondos de programas como Reactiva Perú, que estaban estacionados en los ahorros a la vista, se están usando en la medida en que se reactivan los negocios, complementó Leyva.
Tasas
Los depósitos a plazo caen 10.5% anual pese al aumento de sus tasas de interés.
Ante la incertidumbre local, las personas y empresas prefieren migrar sus recursos a productos que permitan una disponibilidad inmediata sin perder los intereses. Adicionalmente, el efecto inflacionario desmotiva al ahorrista.
Por ello, y considerando los incrementos de la tasa de interés de referencia y los encajes del BCR, las entidades financieras están ofreciendo mejores tasas de interés para atraer tales excedentes.
Así, según datos de la SBS, en el plazo a un año, que es el que más frecuentemente toman las personas, la tasa de interés promedio en soles subió de 1.35% en agosto a 2.14% a la fecha, mientras que para plazos de más de un año, el aumento es de 2.17% a 3.11%.
Cuentas de ahorros
El único tipo de depósito que crece en esta coyuntura son las cuentas de ahorros, que se han expandido 14.9% anual. “Eso puede estar vinculado a los últimos rezagos de los retiros de los fondos de pensiones de las AFP o incluso de cuentas CTS”, estimó Guerrero.
EN CORTO
Perspectiva. Es muy probable que los depósitos terminen el año con una caída, señaló Mario Guerrero, de Scotiabank. Estimó que en el 2022 el comportamiento de los mismos podría seguir siendo negativo.
Dependerá de cuánto crezca la economía y de cuánto tarde en recuperarse el mercado laboral, dijo. Si no hay una recuperación muy firme la gente va a seguir haciendo uso de sus ahorros, afirmó.