El paso más importante para lograr una verdadera independencia es tomar la decisión de mudarse de la vivienda familiar y vivir solo. Sin embargo, así como puede traer muchos beneficios, conlleva a superar una gran cantidad de retos; entre ellos el mayor presupuesto, en medio de una crisis económica mundial.
No solo se trata de amoblar un espacio, sino también considerar un lugar adecuado para vivir, la mudanza, alimentación, optimización del tiempo para realizar actividades y el orden de tus finanzas personales.
“La recomendación más importante es hacer un presupuesto personal o familiar que implica vivir solo. No es lo mismo vivir con los papás, donde de repente pagas solo el internet y la luz y el agua, o algo para el mercado, que vivir solo. Hay una serie de gastos que empiezan a aparecer, probablemente, o sea, que no estaban en tu radar cuando vivías con tus padres y que ahora ya van a formar parte de tu día a día o de tu mes a mes”, dice Jorge Carrillo Acosta, experto en finanzas de Pacífico Business School.
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Encontrar un lugar adecuado para vivir
Según Urbania, el precio medio de alquiler de un departamento de 100m2 se ubica en S/ 3,015 por mes (a agosto); siendo esta una cifra variable de acuerdo al distrito.
Por ello, será clave elegir el lugar adecuado estará siempre de acuerdo a tus necesidades, estilo de vida y presupuesto, señaló Claudia Calderón, organizadora de interiores.
En esa línea, mencionó algunos consejos a tomar en cuenta:
- Define tus prioridades de ubicación: un espacio cerca a tu centro laboral, universidad, servicios, acceso a transporte público; tamaño de espacio, habitación extra y estacionamiento.
- Investiga la zona: visita el vecindario a diferentes horas del día, si hay seguridad o vigilancia, ruido, iluminación pública.
- Revisa el contrato: debes tener en cuenta los términos del contrato con el tema de garantías y montos.
- Evalúa las condiciones: observa el sistema eléctrico, si tiene problemas de humedad, deterioro o fugas. Investiga también la calidad de internet en la zona y conversa con algunos vecinos acerca de las reglas, si permiten mascotas y horarios de ruido. Observa si hay construcciones cercanas que puedan beneficiarte como centros comerciales o perjudicarte por ruidos que impidan tus labores.
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¿Qué necesito en mi nueva casa?
Al encontrar el lugar ideal para vivir, viene la segunda parte: ¿qué cosas básicas debo tener, o qué debería comprar si quiero amoblar mi casa por completo?
“Si deseas iniciar con lo básico, es importante tener una cama, un juego de sábanas y una almohada. Además, necesitas una cocina, refrigeradora, hervidor de agua, juego de ollas, platos y cubiertos. Le puedes sumar artículos de limpieza como escoba, detergente, lejía, bolsas de basura y papel higiénico”, agregó la especialista.
El precio de estos artículos es variable, de acuerdo a la marca, tecnología y lugar de compra. Por ejemplo, una cama con tarima puede llegar a costar desde los S/ 400 hasta los S/ 4 mil aproximadamente, en conocidas tiendas retail.
- Cama Box Tarima: entre S/ 400 y S/ 4 mil
- Juego de sábanas: entre S/ 40 y S/ 150
- Cocina: entre S/ 350 y S/ 5 mil (también hay cocinas eléctricas desde los S/ 50)
- Refrigeradora: entre S/ 500 y más de S/ 10 mil (también hay frigobares desde los S/ 250)
- Juego de ollas y sartenes: entre S/ 150 y S/ 1,500
- Comedor: entre S/ 500 y S/ 16 mil
- Lavadora: entre S/ 600 y S/ 4 mil
- Ropero: entre S/ 300 y S/ 4 mil
- Utensilios de limpieza: de acuerdo a necesidad
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Si bien es cierto, hay algunos electrodomésticos o muebles que puedes tener. Sin embargo, si cuentas con un presupuesto más elevado, tienes otras opciones que puedes acondicionar a tu nuevo hogar. Entre ellos:
- Microondas: entre S/ 230 y S/ 3,500
- Cómoda: entre S/ 150 y S/ 4,500
- Muebles: entre S/ 450 y S/ 18 mil
- Cafetera: entre S/ 200 a S/ 1 mil
- Televisor: entre S/ 300 y S/ 70 mil
- PC de escritorio o laptop: entre S/ 700 y S/ 20 mil
- Equipo de sonido: entre S/ 500 y S/ 15 mil
“Es ideal cuando te encuentras en una transición, como una mudanza, las organizaciones de espacio. Por tanto, es importante contar con una organizadora. Este tipo de profesionales optimizan cada espacio y conocen de tendencias y productos de almacenamiento eficientes. Además, mejora la funcionalidad y estética. Organizando tu espacio te evitas compras innecesarias”, sostuvo Claudia Calderón.
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Servicios, alimentación y otros gastos
Dentro de las necesidades básicas están los servicios de agua y luz, que varían de acuerdo al consumo y zona de residencia. También está el costo por servicio de internet, que varía dependiendo e tipo de plan.
“Por ejemplo, los gastos domésticos, el alquiler de la vivienda, la cuota del crédito hipotecario, el mantenimiento del edificio, la seguridad, la luz, agua, el gas, el internet, el cable, los productos de limpieza, el servicio doméstico, eso para empezar. Son gastos que de repente solo una parte de ellos yo pagaba cuando vivía con mis padres. Lo otro que hay que considerar son los gastos de alimentación o la manutención de la familia, básicamente”, consideró Jorge Carrillo Acosta.
De igual forma, añadió el especialista en finanzas de Pacífico Business School, hay gastos en alimentación, aseo personal, salud, que probablemente tampoco se tenía cubierto al 100%, sino una parte eran subsidiados por los padres.
“Y el tercer gasto que probablemente se incluya también, aunque de pronto eso no va a ser un gran cambio, pero habría que ver si se considera ese gasto de transporte, porque la distancia no es la misma, de repente, desde la casa de mis padres a mi oficina, que de la casa de mi nuevo departamento a mi centro de labores o de estudios. Entonces, si voy a comprarme un carro, bueno, obviamente, el combustible, mantenimiento, repuesto, SOAT, seguro vehicular, cochera, parqueo, lavado, etc. Y si tomo transporte público también de repente implicará algún aumento. Básicamente, esos tres tipos de gastos son los que se incrementan cuando vivo solo y tengo que considerarlos al momento de decidir si me mudo o no y si me conviene o no mudarme por la independencia tan buscada”, puntualizó.
Escribo sobre política, economía y afines. Periodista con nueve años de experiencia en prensa escrita, radio y televisión.
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