Entre las modificaciones anunciadas por Alfin Banco (ex Banco Azteca) se mencionó la desaparición de los créditos semanales puesto que implican un uso excesivo de mano de obra para cobro y otorgamiento.
Los créditos semanales tienen como propósito financiar las operaciones de microempresarios a micro plazos, periodos de siete a 45 o 60 días, dijo Edmundo Lizarzaburu, profesor de la carrera de Administración y Finanzas de la Universidad Esan.
Su estructura permite tener el recurso a nivel operativo y cuadrarlo con el flujo de cobranzas que el solicitante pueda tener, tomando en cuenta que estos créditos pueden ser solicitados por empresas o personas, agregó.
Refirió que, si bien la entidad indicó que dejará de dar estos créditos por el costo que implican, toda eliminación de un producto genera la necesidad de reemplazar los ingresos que este dejaba a la entidad, por lo que el flujo podría pasar a los préstamos mensuales o a la tarjeta de crédito.
Asimismo, señalo que la reducción en la tasa de interés del producto lleva a la entidad a realizar un análisis para establecer si el producto permite cubrir no solo los costos operativos sino además las potenciales provisiones que se puedan generar por la demora en el pago (deterioro de la calificación de los créditos).
Esto conduce a una potencial búsqueda de eficiencias por parte de la entidad, para tener una cartera más saludable y reducir sus indicadores de morosidad, acotó.
“Es entendible que una entidad reitere un producto o deje de promocionarlo en la búsqueda de eficiencias y eso es un aspecto que se podría replicar, sobre todo, porque tenemos que buscar no solo la liquidez sino la gestión y eficiencia que se puede dar”, manifestó.
Según Lizarzaburu, la eliminación de los créditos semanales llevaría a las mypes a enfocarse en el corte de negocio y financiar requerido pues el tener que proyectar a más de una semana podría implicar beneficios en las compras y el abastecimiento.
Sin embargo, pasar de una programación semanal a quincenal o mensual en una mype, con una pandemia que aun continua, es difícil, mencionó.
Si bien la tasa máxima entra en el tope establecido por la ley y publicado por el Banco Central de Reserva (BCR), el empresario está enfocado en la liquidez para sostener su negocio, no romper la cadena de pagos y poder asistir a los dependientes, añadió.