El escenario económico complicado genera que muchos peruanos tengan problemas para llegar a fin de mes. Sin embargo, hay algunas opciones a las que puede acudir para cubrir sus gastos si el sueldo no le alcanza.
La primera opción para salir de un apuro es un crédito de consumo o libre disponibilidad, sin garantía, pues ofrece plazos flexibles y puede ser usado para cualquier gasto, desde pagar facturas hasta comprar bienes duraderos, dijo Edmundo Lizarzaburu, docente de Administración y Finanzas de la Universidad ESAN.
Sin embargo, puede llevar a una mayor deuda y problemas financieros si no es bien administrado, pues mejora la liquidez pero el costo financiero ha incrementado, señaló.
Además, los requisitos de aprobación pueden ser estrictos si el historial crediticio del solicitante no es sólido, por lo que será más difícil que consiga el financiamiento, agregó.
La tasa de interés promedio del crédito de consumo bancario es de 50.2%, según datos de la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS).
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Otra alternativa para un préstamo de rápida gestión es aquel que se otorga con joyas de garantía, pues no requiere de mucha evaluación, comentó Yang Chang, docente de Finanzas de la Universidad de Piura.
El problema con este crédito es que frente ar problemas de pago, se ejecutará la prenda que respalda el financiamiento, aunque esto no represente una pérdida directa de su patrimonio, añadió.
La tasa promedio de un préstamo pignoraticio en una caja municipal es de 73.55%.
La tercera opción es el crédito con garantía de un depósito plazo fijo, cuya tasa de interés puede ser baja, porque la cobertura es una cuenta de ahorros que gana intereses, y otorga plazos flexibles, refirió Lizarzaburu.
Pese a ello, el deudor debe tener en cuenta que, de incumplir con el préstamo, perderá la garantía y pueden generarse costos adicionales. Asimismo, en caso tenga una emergencia no podrá liberar su depósito a plazo hasta que haya pagado el crédito, complementó.
Para Chang, una cuarta herramienta de financiamiento podría ser la tarjeta de crédito, para compras de corto plazo que no generen muchos intereses al usuario.
Aunque advierte que se debería evitar dividir el pago de las compras en muchos meses, pues lo ideal es que se utilice como medio de pago y cubrir la deuda al final de cada mes. El costo de la tarjeta de crédito es uno de los más elevados y se incrementa más si el titular decide disponer de efectivo, agregó.
La quinta opción para cubrir gastos podría ser un adelanto de sueldo, facilidad que otorgan algunos bancos a los clientes que tienen su cuenta de haberes o cuenta sueldo con ellos, expresó Lizarzaburu.
Empero, debe ser para cubrir imprevistos menores y temporales porque el siguiente mes el pago le será descontado cuando el empleador abone la remuneración, manifestó.
Los especialistas mencionaron que una alternativa adicional para algunos trabajadores formales es el préstamo por convenio, aquel que otorgan las entidades financieras y lo descuentan mensualmente de la planilla del empleador.
Frente a este panorama, Chang alertó que, antes de escoger una fuente de financiamiento, el usuario debe identificar si tiene un problema temporal o estructural en sus finanzas, si solo es un periodo difícil podría utilizar una herramienta de crédito, de lo contrario, esta no le servirá de mucho.
Si es un problema de fondo, lo mejor es ser sincero consigo mismo y adecuar el presupuesto a la nueva realidad personal o familiar, agregó.
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