La protección de los datos personales es un derecho fundamental de todo ciudadano y las entidades financieras a las que se entrega esta información están obligadas a hacer un uso responsable de la misma y a cumplir con la normativa vigente.
Sin embargo, hay un 27% de peruanos que desconfía del uso que pueden hacer los bancos de sus datos personales y prefiere no darles acceso a ellos cuando se les ofrecen un nuevos servicio o función, según el informe Global Retail Banking 2022 de Boston Consulting Group (BCG).
“Puede haber cierto temor de estos clientes a la forma cómo se hace uso de los datos personales influenciado por factores ajenos a los bancos”, consideró Luis Ernesto Marín, especialista en regulación financiera de Porto Legal.
En los últimos años se han denunciado casos de suplantación de identidad y de robo de datos personales para vaciar cuentas bancarias o realizar transacciones que luego no son reconocidas por los usuarios del sistema financiero.
Marín refirió que todas las entidades financieras deben de cuidar la información de sus clientes en dos esferas distintas.
Por un lado, están obligadas a cumplir la ley de datos personales, que exige cuidar esa información y solo utilizarla para aquellos fines que el cliente dio su autorización, indicó Marín. Asimismo, las entidades financieras tienen que aplicar políticas de ciberseguridad para evitar el robo de información, añadió.
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“Creo que el tema de uso de datos personales por parte de los bancos está bien cubierto y la respuesta de estas personas viene influenciada por los fraudes que se dan a nivel del sistema financiero, que a veces tienen que ver con errores de los propios clientes”, sostuvo el experto.
¿Qué piden los clientes para compartir sus datos?
Para las instituciones financieras tener acceso a los datos de sus clientes les permite contactarlos más fácilmente y ofrecerles productos financieros más personalizados, destacó Juan Carlos Ramírez, gerente senior de consultoría para la industria financiera de EY Perú.
Según el estudio BCG, existe un 38% de peruanos que lee atentamente los términos y condiciones detallados de una propuesta financiera antes de aceptar compartir sus datos. Aunque el 24% dijo que sí proporcionaría su información personal si se le entrega un breve resumen de qué datos se utilizan y para qué se utilizan.
En los contratos de productos o servicios que los clientes firman con los bancos se establece el tratamiento de los datos personales, indicó Marín. “Lo que pasa es que muchas personas no se enteran de lo que están firmando”, añadió.
Ramírez destacó que los bancos están realizando campañas para advertir a los clientes sobre comportamientos respecto a la entrega de sus datos personales que deben evitar para ser víctimas de fraudes.
Seguridad de datos personales
Respecto a la seguridad de los datos personales, los peruanos confían menos en sus bancos que en el resto de la región, según el reporte de BCG.
En una escala del 1 al 10, califican con 6.6 la confianza que tienen en que su banco mantenga sus datos seguros, la menor de los países de América Latina. La calificación baja a 5.7 si se trata de un banco digital.
“Creo que eso es por un tema generacional, las personas mayores no confían en el tema digital porque no lo entienden”, opinó Marín. Las personas menos familiarizadas con el mundo digital representan más riesgo de caer en fraudes, dijo Ramírez.
Banco “amigo”
Los clientes de todos los países considerados en el estadio de BCG quieren que sus bancos se sientan más como un “buen amigo” a quien puedan acudir en busca de un consejo honesto.
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En Perú, específicamente, 16% de los consumidores ya sienten que su banco es un “buen amigo”, mientras que a 33% le gustaría que se convierta en aquella institución a la que pueden acudir para conseguir recomendaciones honestas.
“Uno de los activos más importantes para las instituciones financieras es la confianza de sus clientes que dejan con ellos sus ahorros”, comentó Ramírez. Por lo tanto, la confianza es un valor y un objetivo clave para la banca.
Consideró que los bancos tienen aún un buen espacio de oportunidad para mejorar en la cercanía con sus clientes.