Desde el 2021, se observa una marcada preferencia por parte de las empresas peruanas por la colocación de instrumentos de corto plazo para financiarse. En este segmento, entran, por ejemplo, productos como los papeles comerciales y los certificados de depósitos negociables.
Las emisiones de corto plazo, según la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV), llegan a representar el 98% del total colocado en lo que va del 2024.
“Las empresas grandes y medianas que están hoy en la bolsa de valores se enfocan en dar eficiencia a su ciclo de negocio. Es decir, ven las cuentas por pagar, las cuentas por cobrar y el inventario. Es por eso que los papeles comerciales resultan un instrumento atractivo que permite a las compañías obtener liquidez”, explicó Edmundo Lizarzaburu, profesor de Administración y Finanzas de la Universidad ESAN.
“Los papeles comerciales son para cubrir potenciales baches que se estén presentando”, resumió el docente.
LEA TAMBIÉN: Empresas peruanas captaron este año un 10% más de financiamiento emitiendo deuda
Además, señaló Lizarzaburu, las compañías están reestructurando su deuda antes de una próxima reducción de la tasa de referencia del BCR. “(Lo observado)está muy asociado a la curva descendente que viene evidenciando la tasa referencial. La idea es ir emitiendo a corto plazo, y, cuando la tasa logre un llano, se podrá hacer una emisión a largo plazo (a una menor tasa)”, indicó.
“Claramente, se está dando una estrategia financiera de corto plazo, pensando que hacia finales de año o inicios a del 2025, se podrá hacer una reestructuración completa que permita tener mejor servicio de deuda y flujos de caja”, añadió Lizarzaburu.
LEA TAMBIÉN: BCRP baja su tasa clave, ¿qué pasará con el dólar?
Además, también habría ausencia de nuevas inversiones. “Las emisiones grandes tienen dos componentes: La reestructuración de la deuda, o cuando la empresa tiene muchos proyectos y requiere un capital intensivo. Hoy en día, lo segundo no se está dando”, remarcó el investigador de ESAN.
Menos demanda de las AFP
Para José Larrabure, wealth manager de Allié Family Office LLC, la preferencia por las emisiones de corto plazo es más bien una respuesta a la menor demanda de las AFP por colocaciones de largo plazo como bonos corporativos.
“Las AFP han privilegiado invertir en activos más líquidos, como bonos soberanos, o bonos del exterior, para poder tener la posibilidad de venderlos en caso haya retiros como se está dando ahora. Ante la incertidumbre, no hay apetito por bonos de más de un año”, sostuvo el gestor.
Para los bonos corporativos, recalcó Larrabure, las AFP son el comprador “ancla” que necesita un emisor para tener certeza de que va a poder efectuar una gran colocación (a largo plazo), de 100 o 200 millones de dólares.
LEA TAMBIÉN: Rally de la BVL se extenderá si se dan estas dos condiciones
En general, los compradores de bonos locales son pocos: las AFP, las compañías de seguros y, en menor medida, la banca privada. Entre estos actores, eran las AFP las que particularmente invertían a largo plazo, refirió el administrador de patrimonios.
“Los emisores peruanos, que son mayormente triple A o doble A, antes tenían dos canales: la banca y la deuda pública (mercado de valores). Si iban a emitir 100 millones de dólares, ya no tienen cómo hacerlo si las AFP no participan. Los demás jugadores son relativamente pequeños. Entonces, solo queda la banca”, enfatizó Larrabure.
Estadísticas
Según la SMV, en el 2023 se emitieron instrumentos de corto plazo en moneda local por S/ 2,325 millones y, adicionalmente, en moneda extranjera por US$ 46 millones. A su vez, se colocaron S/ 1.700 millones por certificados de depósito negociables. En cambio, solo se emitieron bonos corporativos por S/ 230 millones en ese mismo año. Ello contrasta con el periodo 2019-2022, cuando se emitieron más bonos corporativos, tanto en soles como en dólares.
Comienza a destacar en el mundo empresarial recibiendo las noticias más exclusivas del día en tu bandeja Aquí. Si aún no tienes una cuenta, Regístrate gratis y sé parte de nuestra comunidad.