Por estos días, los clientes del sistema financiero con las mejores calificaciones crediticias vienen recibiendo, a través de llamadas telefónicas, mensajes de texto y correos electrónicos, ofertas de compra de sus deudas con reducciones atractivas en las tasas de interés.
Las entidades financieras, lideradas por los bancos más grandes, han intensificado sus campañas y hoy ofrecen tasas de interés de hasta 9% anual para operaciones de compra de créditos de consumo.
En el mercado se ven reducciones de tasas de interés de 50%, indicó una fuente del sector bancario. Por ejemplo, si la tasa original del crédito de consumo era de 18%, se está ofreciendo al titular de ese préstamo comprarle la deuda a una tasa de 9%, es decir, a la mitad, añadió.
A la orden del día
En bancos, el costo promedio anual de los préstamos de consumo es de 38.7% y llega a 48.2% para las tarjetas de crédito, según la SBS.
“La compra de deuda está a la orden del día, los bancos grandes están entrando a jugar en esa liga con tasas mucho más convenientes, y el resto de empresas financieras están viéndose obligadas a bajarlas más aceleradamente”, refirió un banquero a Gestión.
En el 2020 los préstamos de consumo disminuyeron 7.1%, y a enero de este año acentuaron su caída (-8.9%), según datos del BCR. Incluso el financiamiento con tarjetas de crédito retrocedió 20.3% el año pasado.
Los bancos, financieras y cajas ahora quieren recuperar el terreno perdido en sus carteras de consumo; y, puesto que hay poca demanda por nuevos créditos, están buscando crecer captando a clientes de la competencia, señaló Walter Rojas, gerente de negocios de Caja Cusco.
Más agresivas
Explicó que para ello están comprando la deuda que tiene el cliente con otra entidad a una tasa de interés más baja y un mayor plazo. Entre las opciones que se ofrecen está la consolidación de dos o tres créditos en uno solo, y la adquisición de préstamos reprogramados, detalló.
Marcello Mundaca, gerente de negocios del portal Comparabien.com, coincidió en que las instituciones financieras están más agresivas en la compra de deuda, pues tienen mucha liquidez y necesitan seguir reactivándose. “Hay mucho apetito por captar clientes”, dijo.
Pero la oferta de este producto se enfoca en los clientes con mejor perfil crediticio. “Aquellos que no han perdido el trabajo o cuyo nivel de ingresos se mantiene son los candidatos estrella para comprarles la deuda”, sostuvo Rojas.
Inteligencia de negocios
Este grupo de deudores con buen comportamiento de pago disminuyó en el 2020 pero ya está empezando a recuperarse, refirió Mundaca.
“Son clientes que tienen un riesgo tolerable para el sector financiero”, dijo la fuente bancaria. Destacó que la banca está utilizando business intelligence (inteligencia de negocios) para segmentar por riesgo a los clientes. “Los sectores socioeconómicos A y B pueden obtener tasa de interés de hasta 10% y el C, de alrededor 25%”, estimó.
Los expertos manifestaron que los bancos más grandes tienen más espaldas financieras para ofrecer tasas más bajas, pues pueden obtener fondos más baratos que el resto de entidades, dijeron.
Según la SBS, en los bancos grandes, la compra anual estimada de deuda llega a representar el 10% de su cartera de consumo.
En las últimas semanas, está más dinámica la compra de préstamos en cuotas que la de tarjetas de crédito, indicó un ejecutivo bancario.
Rojas estimó que este año seguirá siendo muy activo para la compra de deuda de consumo dada la coyuntura. “Veo a los bancos grandes señalando el camino para los otros bancos”, sostuvo.
Levantan barreras para retener a clientes
Las entidades financieras están levantando barreras para evitar que la competencia se lleve a sus clientes y sus carteras de crédito mediante compra de deudas, señaló Marcello Mundaca, de Comparabien.com. Sin embargo, las de menor tamaño tienen menos espacio para competir en tasa de interés con las de mayor envergadura.
En los bancos especializados en consumo, por ejemplo, en promedio, pueden ajustar sus tasas de préstamos de consumo de 30% a 25% para la compra de deuda. “Pero no puedes bajar a 15%; sería una locura, tendrías que refundar el banco de consumo”, dijo un ejecutivo del sector.
Walter Rojas, de Caja Cusco, indicó que para retener a un buen cliente que recibió una oferta de otra institución financiera se puede hacer esfuerzos para igualar o mejorar las tasas de la competencia. Pero en bancos medianos y cajas, las mejores condiciones se enfocarían en los clientes muy exclusivos, dijo Mundaca.