Espectadores. Por cada entrada virtual vendida, el evento es visto hasta por ocho personas. (Foto: iStock)
Espectadores. Por cada entrada virtual vendida, el evento es visto hasta por ocho personas. (Foto: iStock)

Los conciertos virtuales se presentaron como una opción para conservar principalmente el trabajo de los músicos que dejaron los escenarios durante la pandemia. Sin embargo, las productoras batallan todavía con un prejuicio del consumidor: que lo digital debe ser gratuito. En esta nota, los productores explican sus principales obstáculos para hacer este negocio rentable y las alternativas que surgen.