El último fin de semana, la Asociación Deportiva de Fútbol Profesional (ADFP) emitió un comunicado en el que advertía sobre algunas “irregularidades” en el concurso de licitación de los derechos de transmisión televisiva de la Liga1.
Cabe recordar que en octubre del 2020, la Federación Peruana de Fútbol (FPF) anunció la firma de un acuerdo para “ofertar los derechos de la Liga1 de manera colectiva con el fin de obtener el mejor precio que estén dispuestos a pagar los proponentes”, según indicaba la nota de prensa compartida con los medios por Grupo Prisma. Y es que, para dicho proceso, la FPF es asesorada por el banco de inversión global Landmark Alantra y el grupo antes mencionado.
Asimismo, es importante mencionar que actualmente los derechos televisivos de la mayoría de los clubes locales pertenecen al Consorcio Fútbol Perú (CFP), creado en el 2013. En entrevista con Gestión (19.01.2022), Giulliana Valverde, administradora general del CFP, sostuvo que el contrato más extenso entre su organización y un club peruano va hasta el 2025.
Según pudo conocer Gestión, la licitación en curso también incluye a clubes que aún tienen contrato con el Consorcio.
La versión de la ADFP
De acuerdo con Óscar Romero, presidente de la ADFP, en los contratos entre los clubes y el CFP existe una cláusula de igualación. “Terminado el contrato, si el club busca otro operador, deberá comunicar al CFP para que este ejerza su derecho de igualar esa oferta o mejorarla. Si no se ejerce ese derecho, el CFP puede ejecutar las cláusulas penales”, explica el dirigente. Es decir, habría una penalización que podría ascender a US$ 20 millones como mínimo, según Romero.
Asimismo, Romero sostiene que él tiene conocimiento de que el CFP ya envió una carta a los clubes instándolos a respetar los contratos vigentes. “A ellos les corresponde presentar una acción de amparo y una medida cautelar porque la FPF está violando su derecho a la libre contratación”, apunta.
“La FPF no solo está atentando contra los clubes, sino contra todo el sistema deportivo de fútbol porque los está dejando en indefensión y los está condicionando. La FPF es un tercero en un contrato entre dos partes”, afirma.
Los encargados del proceso
Pablo Larraín, socio de Landmark Alantra, banco de inversión a cargo del proceso, asegura que se está entrando a la fase final del proceso de licitación.
“La expectativa es generar una mejora importante en los beneficios para los distintos clubes; no solo económicos, sino también en lo que respecta a la calidad de las transmisiones”, detalla.
En ese sentido, el ejecutivo indica que se ha realizado un proceso abierto, competitivo y transparente, en el que todos han sido invitados a participar. “Se han dado las garantías de transparencia, sin exclusiones de ningún participante”, agrega.
Preguntado sobre el potencial comercial de la Liga1, Larraín comenta que esta tiene un gran atractivo en el mercado y, al igual que en todo el mundo, marca el desarrollo de otros negocios asociados al entretenimiento. “Por ejemplo, la distribución de la TV Paga y la distribución de banda ancha. Asimismo, vemos que tendrá un impacto en las nuevas tecnologías que se están desarrollando y la forma de distribuir contenido en los próximos años”, finaliza.