Tan cerca como lejos

Mattia sabía que entre los números primos existían algunos particularmente especiales. Como los primos gemelos: parejas de números primos separados por un único número par, como el 11 y el 13, el 17 y el 19 o el 41 y el 43. Lo mismo imaginaba Mattia que sucedía entre él y Alice. Dos almas solitarias, alejadas y rechazadas, que podían mirarse y reconocerse, aunque no lo suficiente para tocarse de verdad.

Alice había sufrido un accidente de esquí cuando era niña, que le había dejado huellas imborrables por todo el cuerpo. Aquel evento la había llevado a odiar a sus padres, a quienes identificaba como los culpables de su desgracia. Sentía tanta vergüenza por sus marcas y al mismo tiempo, tantos deseos por pertenecer que, en esa búsqueda desesperada de aceptación, se encontró una y otra vez, con el rechazo brutal de un mundo ajeno y cruel.

Mattia, por su parte, había asumido la responsabilidad de proteger a Michela, su hermana melliza, afectada por una discapacidad mental. Una tarde de invierno, la dejó sola en el parque para asistir al cumpleaños de un compañero de clases, y desde entonces nunca más se le volvió a ver.

La vergüenza y el rechazo arrinconaron a Alice en su soledad, mientras que el dolor y la culpa impulsaron a Mattia a aislarse en sí mismo. Desde sus distancias, Mattia y Alice se encontraron en el instituto y fueron descubriendo que “… estaban unidos por un hilo invisible, oculto entre cosas de poca importancia, que sólo podía existir entre dos personas como ellos: dos soledades que se reconocían”.

Paolo Giordano encuentra las palabras precisas para describir con profundidad y sensibilidad los oscuros laberintos donde se mueven los protagonistas que, en sus intentos de acercarse, se estrellan constantemente contra los muros que ellos mismos levantan para protegerse de sus culpas, dolores, furias y vergüenzas.

Y esa pluma ágil, sutil y precisa sigue deslumbrando al lector, cuando descubre las grietas que se abren en medio de las barreras invisibles que separan a Mattia y Alice, desde donde cada uno puede vislumbrar la soledad del otro, pero resultan todavía muy estrechas para traspasarlas y poderse tocar de lleno. Es una obra imperdible, sincera y valiente, que se asoma por los abismos de la soledad y comprende que, en ocasiones, el amor no es suficiente.

DATO

Paolo Giordano es licenciado en física teórica y sólo contaba con 26 años cuando se publicó la novela.

CLAVES

1) Un número primo es un número natural mayor a 1 que tiene únicamente dos divisores positivos: él mismo y el 1.

2) Mattia es un genio matemático, que se inflige daños intencionalmente. Alice no tiene una vocación definida y sufre de desórdenes alimenticios.

3) Para la portada del Libro, Giordiano eligió el autorretrato de una modelo holandesa, que muestra un rostro intencionadamente ambiguo.