Las ciencias de la salud investigan desde hace varias décadas la relación entre la esperanza y la calidad de vida del ser humano. Se privilegiaba y reforzaba el principio del “logro”, como “alcanzar status”, que los mandatos de la sociedad imponía como modelo a seguir, lo que nos hacía vivir una ilusión del sentido de “estar bien”.
Sin embargo, la calidad de la vida trasciende este modelo inconsciente que solo obedece a estereotipos. "Hemos estado viviendo apurados, siempre ocupados, ciegos de nosotros mismos. Actuábamos desde la imperiosa necesidad de 'Conquistar - Alcanzar', donde prevalecía “El yo tengo - yo puedo" en vez del 'Yo quiero trascender y estar bien'", revela la psicóloga Roxana Lingán.
Ante el elevado riesgo en la salud por la pandemia del Covid-19, Lingán resalta la importancia de enfocar nuestras prioridades de vida a través de un autocuidado consciente como el mayor factor de protección ante el contagio.
¿Cuáles son los principales mecanismos de protección? Lingán sugiere nueve:
1.- Calidad de sueño. Dormir de 6 a 8 horas diarias, sin interrupción.
2.- Calidad de energía física. Realizar una rutina de ejercicios.
3.- Calidad de alimentación. Compra de alimentos y alimentación saludables. Además, reorientar la alimentación saludable para pacientes crónicos (diabetes, obesidad, hipercolesterolemia)
4.- Menos ansiedad. Reducir los niveles de ansiedad asociados a la conducta alimentaria a fin de no tener sobrepeso.
5.- Desarrollo de salud emocional. Aprender nuevas habilidades para el flujo emocional, como mindfulness, danza/musicoterapia, yoga, o técnicas de biorretroalimentación para pacientes crónicos.
6.- Organización de espacios virtuales. Meditación para activar la energía emocional y espiritual.
Lingán recomienda, además, llevar programas de educación de hábitos saludables y calidad de vida, así como seguir un plan de mejoramiento de calidad de vida laboral y familiar a través de buenas prácticas en estilos de vida saludable.
Para estar bien con uno mismo, Lingán también propone un enfoque multimodal:
1.- Incorporar el hábito de la gratitud.
2.- Escuchar música que aporte serenidad y calma a la mente y al cuerpo.
3.- Leer historias positivas y de crecimiento personal.
4.- Consumir información de calidad, que aporte, pero que no genere temor o angustia.
5.- Buscar y promover espacios de compartir con los seres queridos.
6.- Crear espacios de socialización virtual.
7.- Aprender en grupo para fortalecer los vínculos.
8.- Liberarse de prejuicios, negativismo y autoexigencia.
9.- Meditar.
10.- Confiar más en uno mismo.
11.- Practicar la tolerancia con los demás.
12.- Aceptar todas las emociones y liberarlas.