Para muchos de nosotros, viajar en avión a bajo coste se ha convertido en la norma más que en la excepción. Sin embargo, la aviación es responsable de alrededor del 2.5% de las emisiones mundiales de CO2, ya que la mayoría de los aviones funcionan con gasolina de aviación.
La Comisión Europea prevé que, a mediados del siglo XXI, la demanda de vuelos podría aumentar las emisiones de gases de efecto invernadero de la aviación en más de un 300% con respecto a los niveles de 2005 si no se toman medidas drásticas para reducirlas, según el portal del World Economic Forum.
El sector de la aviación ha adoptado el objetivo de alcanzar cero emisiones netas de carbono para 2050. En octubre, la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) de la ONU dirigió dos semanas de negociaciones en las que participaron 184 países para acordar medidas de reducción de las emisiones de CO2.
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Entre ellas figuran el aumento de las tecnologías innovadoras en las aeronaves, la “racionalización” de las operaciones de vuelo y el incremento de la producción y el uso de combustibles de aviación sostenibles (SAF).
“La adopción por parte de los Estados de este nuevo objetivo a largo plazo para la descarbonización del transporte aéreo, tras los compromisos similares de los grupos industriales, contribuirá de forma importante al impulso de innovación y aplicación ecológicas que debe acelerarse en las próximas décadas para conseguir, en última instancia, vuelos propulsados sin emisiones”, declaró el Presidente del Consejo de la OACI, Salvatore Sciacchitano.
“A medida que pasamos del compromiso a la acción, es esencial que la industria esté respaldada por los gobiernos con un objetivo de descarbonización”, dijo Laia Barbarà, Líder de Descarbonización de la Industria para la Aviación en el Foro Económico Mundial.
“El Objetivo Aspiracional a Largo Plazo (OAPL) de la OACI de cero emisiones netas para mediados de siglo es un gran paso adelante en esa dirección. El Foro Económico Mundial está dispuesto a apoyar a la OACI, a los gobiernos y al sector privado a nivel mundial en su trabajo sobre los próximos pasos”, añadió.
Combustible de aviación más sostenible
Los combustibles de aviación sostenibles pueden reducir las emisiones en un 80%, según la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA). El SAF puede fabricarse a partir de varias fuentes, desde residuos agrícolas hasta carbono capturado del aire.
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Es totalmente compatible con las aeronaves y la infraestructura de abastecimiento de combustible existentes. Sin embargo, los elevados costes de producción y el suministro limitado han frenado su adopción. Se calcula que el SAF representa menos del 0.1% de todo el combustible de aviación utilizado actualmente.
La IATA calcula que el SAF podría representar alrededor del 65% de la reducción de emisiones que necesita la aviación para alcanzar el objetivo de cero emisiones netas en el 2050. Sin embargo, afirma que “esto requerirá un aumento masivo de la producción para satisfacer la demanda”. La mayor aceleración se espera en la década de 2030, a medida que el apoyo político se haga global, el SAF se haga competitivo frente al queroseno fósil y las compensaciones creíbles se vuelvan más escasas.
Compensación de emisiones de la aviación
Según la IATA, el sector de la aviación no podrá eliminar por completo las emisiones en origen y tendrá que mitigar el resto mediante diversos mecanismos de compensación. Se trata del proceso por el que se compensan las emisiones mediante la financiación de una reducción de las mismas en otro lugar.
La OACI adoptó el Sistema de Compensación y Reducción de Emisiones de Carbono para la Aviación Internacional (Corsia) en 2016, que ha sido anunciado como la primera medida global basada en el mercado para cualquier sector. La IATA afirma que “Corsia pretende estabilizar las emisiones netas de CO2 de la aviación civil internacional en los niveles de 2019, a partir de 2021, utilizando programas de compensación.” Y añade: “prevemos que, a medida que se generalicen nuevas tecnologías como el SAF, disminuirá la necesidad de compensaciones”.