El sobrepeso y la obesidad son dos problemas que afectan a gran parte de la población, poniendo en grave riesgo su salud integral. Sin embargo, pocas veces hablamos de cómo estos males afectan también a nuestro entorno profesional y nuestro rendimiento en el trabajo.
“Es muy importante que las personas, sobre todo los adultos trabajadores, sean conscientes que nuestra salud no solo nos permite disfrutar de una vida plena sino también nos permite desenvolvernos de manera óptima en el trabajo”, señala Gianina Berdejo, Médico General de Sanitas.
“La obesidad y el sobrepeso pueden darnos serios problemas en el trabajo debido al incremento en el ausentismo, e incluso, el aumento de probabilidad de sufrir un accidente laboral”, agrega.
Berdejo explica cinco formas en que el sobrepeso y la obesidad pueden afectar tu trabajo:
1) Alteraciones respiratorias
Debido al exceso de grasa, las vías aéreas se ven obstaculizadas, lo que provoca una menor oxigenación tanto al cerebro como al organismo, lo que podría ocasionar un menor rendimiento laboral.
2) Apnea del sueño
Suele ser una complicación de la obesidad. Este desorden altera el sueño, siendo un factor de riesgo en accidentes de tránsito entre los conductores de vehículos.
3) Enfermedades articulares
Debido al exceso de peso corporal, las articulaciones pueden sufrir daños; ocasionando dolor e inflamación. Esto puede traer consigo un movimiento limitado, incapacitando a las personas para deambular o cargar objetos.
4) Complicaciones con enfermedades crónicas
La obesidad está asociada con enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, hipertensión arterial y alteración de los niveles de colesterol y/o triglicéridos.
5) Afecciones psicológicas
Muchas veces, los problemas de peso corporal pueden influir negativamente en la autoestima, manifestándose como inseguridad, aislamiento social y alteraciones emocionales; lo que complicaría superar los retos laborales.