Cuando los gobiernos han relajado sus medidas frente a la pandemia de COVID-19 y la población ha dicho adiós al uso de las mascarillas, dejando en compás de espera sus dosis de refuerzo de la vacuna, unas subvariantes que han sido bautizadas como “Perro del infierno” y que podrían ser las causantes de la próxima ola pandémica vienen avanzando.
Se trata de las subvariantes de ómicron BQ.1 y BQ.1.1. La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó en octubre 2022, que el sublinaje BQ.1.1 había sido hallado en pacientes de al menos 29 países.
La ministra de Sanidad de España, Carolina Darias, asegura que las subvariantes BQ.1 y BQ.1.1 de ómicron serán las mayoritarias a finales de noviembre o principios de diciembre. Por el momento, solo representan el 2,7% de los casos, siendo todavía BA.4 y BA.5 las dominantes. Sin embargo, su facilidad de contagio es lo que preocupa.
¿POR QUÉ A LAS NUEVA SUBVARIANTES DE ÓMICRON LES DICEN “PERRO DEL INFIERNO”?
Las nuevas subvariantes de ómicron, BQ.1 y BQ.1.1, han sido bautizadas en las redes sociales como “perro del infierno”, en alusión a Cerberus, el can del dios Hades en la mitología griega, que se encargaba de guardar las puertas del inframundo.
La misión del diabólico animal era guardar las puertas del infierno, situadas al final del trayecto por la la laguna Estigia en la barca de Caronte. Desde hace nueve años, Cerberus y Estigia también prestan su nombre a dos lunas de Plutón, las últimas descubiertas hasta la fecha en el planeta enano de nuestro Sistema Solar.
¿CUÁL ES EL PELIGRO DE “PERRO DEL INFIERNO”?
El peligro del “perro del infierno” es su rápida capacidad de propagación y que sería la causante de una nueva ola tanto en Europa como en América del Norte.
- Tiene rápida capacidad de propagación.
- De acuerdo con el Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermedades, su prevalencia y ritmo superarán el 50% de los contagios en menos de un mes.
- Sus mutaciones tienen un grado de evasión inmunológica enorme, pero no reviste casos de mayor gravedad.
- Existe una probabilidad bastante alta de que fuese un 10% más contagiosa, de acuerdo con Cornelius Roemer, investigador de la Universidad de Basilea.
¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS DE “PERRO DEL INFIERNO”?
A continuación, la sintomatología de la variante:
- Dolor de garganta
- Fatiga
- Tos
- Malestar general
- Afonía
- Diarrea
- Secreción nasal
- Dolor de cabeza
- Ahogo
- Pérdida de olfato y gusto
- Pérdida de apetito
- Estornudos
- Elevación inusual del ritmo cardiaco
- Afonía