Para la categoría de prendas de vestir, la venta mediante canales digitales solía enfrentar más desafíos que en otros rubros. Sin embargo, tal dificultad se habría diluido en la pandemia del covid-19 en la app de WhatsApp.
Así lo reveló el estudio WhatsApp en el mercado de comercio minorista peruano, realizado por Accenture en asociación con Facebook, el cual indica que dicha app de mensajería se convirtió en espacio para comprar más de 30 categorías.
De todas ellas, la ropa es la segunda más importante (39%), luego de productos de higiene personal, superando a la comida fresca y perecedera, limpieza del hogar, belleza y otros, refirió Ignacio Iglesias, Country Manager de Accenture Perú.
Por su parte, Seth Pérez, Group Director de Fjord Lima, parte de Accenture Interactive, consideró que tal cambio respondería a una serie de factores, como la orientación del emprendimiento a ese rubro.
“De repente no tenías nada que ver con el comercio de ropa, pero por la pandemia encontraste ahí recursos para sostenerte y las tiendas que cerraron pusieron sus catálogos en las redes”, comentó a Gestión.
Asimismo, reconoció que el contexto puso en valor el consumo de apoyo a las tiendas de cercanía y que los pequeños comerciantes tienen más flexibilidad para dar detalles, fotos, tallas y otros aspectos que habrían terminado rompiendo la desconfianza del consumidor en la compra de ropa por internet.
“En esta etapa inicial, si le ponen buena voluntad pueden dar una experiencia bastante más completa que grandes tiendas que recién están en esa etapa de cómo abordo los canales digitales”, anotó.
Alta frecuencia, pero bajos tickets
En el sector retail, Iglesias afirmó que las empresas tienen varias oportunidades con el uso de WhatsApp. Y es que, si bien la frecuencia de compra es alta (más de la mitad lo hace al menos una vez por semana), los tickets son bajos.
“La primera oportunidad es cómo hacemos para que la compra vaya fluyendo a categorías más grandes. Cuando el ticket es más alto, aún hay la necesidad de la tienda física, se quiere arriesgar menos”, anotó.
Refirió que las personas realizan compras de hasta S/ 300 en WhatsApp, pero podría ser mayor.
En tanto, consideró que también hay espacio para acoger a las grandes superficies del retail, pues el 63% de las empresas que venden en WhatsApp en Perú son pequeñas y solo 35% son grandes.
“Hay una logística que se requiere para darle al canal lo que el cliente necesita, porque si no hay una respuesta con inmediatez razonable, el atributo se cae”, puntualizó.
Desafíos
De cara al periodo pos pandemia, el uso del WhatsApp en las empresas enfrenta la barrera de mantener la experiencia personalizada y ampliarla a segmentos más masivos. “Las personas que empezaron a comprar por WhatsApp tejieron una red de contactos para adquirir productos locales que no se podía comprar en el supermercado u otra tienda grande”, afirmó Ignacio Iglesias.
Refirió que las compras han sido pequeñas y a la vez arriesgadas, pero ahora está el desafío de tener a dicha app como una plataforma más estable de digitalización, asumiendo los beneficios y riesgos. En tanto, el consumidor tiene expectativa de lo que pueda pasar, pues a diferencia de un sitio web, si el vendedor desaparece de WhatsApp ya se pierde el contacto.
Para el estudio se tomó una muestra de 617 peruanos, hombres y mujeres de 18 a más de 50 años de edad, de todos los segmentos socioeconómicos.
CIFRAS Y DATOS
Adopción. El 77% de peruanos usa WhatsApp como parte de procesos de compra.
Productos. En promedio, cada persona compra 5.9 productos por WhatsApp en cada ocasión.
Proceso. El 65% de las compras por WhatApp se originaron al ver el producto en redes sociales.