Vivimos en una etapa marcada por grandes cambios, y la crisis política, económica y social en todo el mundo es cada vez más difícil de ignorar. Los líderes en las empresas tienen que enfrentar múltiples desafíos como la escasez de recursos, descontento social, inestabilidad política, fragilidad económica, digitalización y la lista puede continuar.
En este episodio, la especialista en Liderazgo y Sostenibilidad, Gisella Benavente – CEO de Axia Consulting Group, nos comparte cómo sobrevivir en una era de gran incertidumbre y baja predictibilidad, y cuál es la mentalidad que necesitan desarrollar los líderes para mantenerse relevantes.
Benavente explica que, en un entorno que cambia continuamente no es posible aferrarse a lo conocido y, por el contrario, debemos ver el mundo con mentalidad de principiante. Las personas con mentalidad de principiante no tienen expectativas preconcebidas y están abiertas aprender, aun cuando ya tengan conocimientos y experiencia sobre determinado tema. En cambio, una mentalidad de experto nos lleva a tener la actitud de que sabemos lo suficiente y, generalmente, no preguntamos antes de tomar una decisión asumiendo que hay una forma correcta de hacer las cosas. “Esta forma de pensar tiende a desviarnos de encontrar nuevas o mejores soluciones a los problemas”, indica.
La especialista recuerda que, a través de la evolución de la sociedad, hemos modificado lo que está normalizado y socialmente aceptado; sin embargo, estamos acostumbrados a definirnos en función a nuestras opiniones e ideologías, lo que es un problema cuando se convierte en un obstáculo para cambiar nuestra forma de pensar mientras el mundo cambia y el conocimiento evoluciona. “Las personas no nacimos con nuestras opiniones y, a diferencia de otras cosas, tenemos total control sobre ellas y podemos elegir cambiarlas”, puntualiza.
Benavente advierte que muchas veces tenemos temor de admitir que estamos equivocados, porque creemos que nos hace ver un poco débiles o menos competentes, lo que no es exacto. En este sentido, cultivar una mentalidad de principiante es una práctica indispensable para todos en esta época, y más aún para los líderes.
¿Cómo hacer frente a la rapidez con la que se mueve el mundo?
Benavente propone que, para mantenerse relevante en este nuevo entorno, un verdadero líder requiere una sólida capacidad de adaptación y tomarse el tiempo de revisar no solo lo que hacemos, sino “por qué” lo hacemos. El reto está en darse el espacio, pues es muy fácil estar siempre ocupado. Esto es crítico cuando somos los responsables de liderar la estrategia de una empresa, pues al no tener tiempo para pensar, podemos estar poniendo en riesgo la supervivencia de la compañía.
La especialista revela que el problema es que estamos acostumbrados a vivir rápido, lo que nos pone en constante estado de alerta y estrés activando en nuestro cuerpo la reacción de “lucha o huida”. Este es un mecanismo automático de supervivencia que prepara al organismo a enfrentarse al peligro, que conlleva múltiples cambios fisiológicos. “Es critico ser conscientes de esto, pues mantener al cuerpo constantemente en este estado puede traer consecuencias en nuestra salud”, reflexiona.
En este sentido, recomienda que si queremos evitar abandonar la carrera antes de tiempo necesitamos proteger nuestros espacios de pausa, pues ayudan a tranquilizar nuestra mente y a tomar mejores decisiones. “Los líderes de hoy necesitan una alta dosis de autorreflexión y autoconocimiento, y desafiarse constantemente a cuestionar sus propias creencias e ideas”, finaliza.