Nelson Shack, contralor general. (Foto: GEC)
Nelson Shack, contralor general. (Foto: GEC)

El informó a través de una conferencia de prensa los procesos de control concurrentes durante la pandemia y los retos para el año 2021, entre los cuales se encuentra la adquisición de las vacunas, los servicios de control que realizarán y futuras operaciones.

De esa manera, sostuvo que la llegada del millón de dosis del laboratorio Sinopharm está dispuesto y todo listo para que el 6 de febrero se despliegue el plan operacional de control para acompañar los procesos de distribución y reducir los riesgos de malos manejos con relación a las dosis que tratarán el coronavirus.

“Estoy convencido. Si bien no tenemos la información detallada desde cuándo llegarán las vacunas, deben estar llegando la siguiente semana. En el control estamos programando el despliegue operacional desde el 6 de febrero para el proceso de distribución y aplicación de las vacunas”, comentó.

Añadió que el proceso de distribución de la primera vacuna no será complejo porque se destinará a personas de la primera línea de acción frente a la pandemia, como trabajadores del sector salud, Policía Nacional del Perú, Fuerzas Armadas y Cuerpo General de Bomberos. Sin embargo, sostuvo que el Centro Nacional de Abastecimiento de Recursos Estratégicos en Salud (Cenares) termina su función cuando las vacunas llegan a los 42 puntos, y que le preocupa cuando las dosis tengan que distribuirse fuera de Lima.

Eso me tiene preocupado porque además en el proceso de descentralización hay un cambio, el Ministerio de Salud es responsable pero cuando llega a los almacenes el responsable es el Gobierno Regional, y seguro entrará la Dirección Regional de Salud y así se hace más complejo”, detalló el contralor.

En otro momento, Shack mencionó que con el primer lote de vacunación no se vacunará a los miembros de mesa, sino que esperarán un próximo para poder hacerlo. Asimismo, recordó que el lunes tendrán una reunión con el grupo de apoyo a la vacuna para que presenten la programación detallada porque “las vacunas deben de tener nombre propio y especificar el lugar donde se vacunará”. No obstante, consideró que es difícil que todos los peruanos se puedan vacunar este año.

Confidencialidad

El contralor indicó también que la confidencialidad de los contratos del Estado con Sinopharm y otros no aplica para la Contraloría. En tal sentido, han solicitado información sobre precios, cronogramas, demoras sobre las vacunas.

Agregó que debe existir un protocolo de registro de vacunación para que puedan evaluar cuántas vacunas se han colocado conforme al gasto hecho por el Ejecutivo. Por ese motivo, conocen los montos negociados para la importación de las dosis.

“Estamos pidiendo información sobre las actas y acuerdos de las negociaciones, así como el precio, cronograma de entregas. Sabemos de que a fines de enero Sinopharm dispuso sus almacenes con el primer millón de vacunas. Ello el Perú tiene que importarlo”, dictó.