El Tribunal Constitucional (TC) emitió un fallo por unanimidad que ordena que el muro que divide La Molina con el distrito de Villa María del Triunfo (VMT), denominado ‘muro de la vergüenza’, sea derribado en un plazo de 180 días. El magistrado Gustavo Gutiérrez Ticse señaló que la infraestructura debe ser demolida en un plazo de 180 días.
De esta manera el órgano jurisdiccional declaró fundada la demanda de hábeas corpus que se interpuso hace cuatro años contra el ‘muro de la vergüenza’. El recurso legal fue interpuesto en el año 2018 por el abogado y dirigente vecinal Carlos Hinostroza contra Juan Carlos Zurek, quien ocupaba el sillón municipal de La Molina.
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Según el hábeas corpus el muro que divide a La Molina en el límite con Villa María del Triunfo vulnera los derechos al libre tránsito, de igualdad y a no ser discriminado por razón de condición económica y social.
“Hemos tomado una decisión unánime de que el muro que divide La Molina con Villa María del Triunfo tiene que ser derribado en un plazo breve, ya lo dirá la sentencia exactamente ¿por qué razón? Porque es una muestra no solo es un atentado a la libertad de tránsito, sino sobre todo es un muro discriminatorio porque divide dos clases sociales y eso es inadmisible en una democracia contemporánea”, señaló en diálogo con RPP Noticias.
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“No puede ser que dividamos a los peruanos por clases sociales. Eso es inadmisible, ya no ocurre en ninguna parte del mundo. Esta sentencia creo que va a dejar un precedente importante. Y creo que los poderes públicos y la sociedad civil deben enrumbar en busca de diálogo, de paz social, de entendimiento, de tolerancia y de respeto a instituciones”, agregó.
El magistrado dijo que solo falta que se publique la sentencia. Gutiérrez Ticse explicó que la tradición en el Tribunal Constitucional ha sido que, por una cuestión de transparencia se adelanta el sentido de los votos, pero la sentencia se publica después que se colectan las firmas.
“El plazo para el retiro del muro es de 180 días una vez que se publican la sentencia”, remarcó.
La construcción del ‘muro de la vergüenza’, de 4.5 kilómetros de extensión, se realizó entre los años 2011 y 2013 con la intención de que no avancen invasiones ante la falta de control urbano en distritos vecinos. El cerco de piedras y púas, que tiene una altura aproximada de 1,5 metros, separa el asentamiento humano La Florida, en Villa María del Triunfo, de la urbanización Las Praderas, en La Molina.