Reuters.- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció el lunes la convocatoria a una Asamblea Constituyente, con el objetivo de crear un nuevo ordenamiento jurídico y redactar una nueva carta magna, lo que derivaría en la celebración de elecciones generales.

"En uso de mis atribuciones presidenciales convoco al poder constituyente originario para que la clase obrera y el pueblo, en un proceso popular constituyente, convoque una Asamblea Nacional Constituyente", dijo Maduro frente a sus seguidores en un masivo acto.

La Constitución venezolana permite al Presidente de la República, a los dos tercios del Parlamento y al 15 por ciento de los electores inscritos en el registro electoral convocar una Asamblea Constituyente.

Una vez elegidos los miembros de la Constituyente a través del voto popular, estos deben redactar una nueva carta magna que no podrá ser objetada por el Presidente de la República y a partir de la cual se deben llamar a comicios generales para todos los cargos de elección popular.

En 1999, en sus primeros meses de mandato, el fallecido presidente Hugo Chávez celebró un proceso constituyente que, entre otras cosas, derivó en un aumento a seis años del período presidencial y permitió a la población revocar los cargos públicos.

Maduro no dio detalles del proceso, pero dijo que se necesitaba "transformar esa Asamblea Nacional podrida", en referencia al poder legislativo cuya mayoría está en manos de sus adversarios políticos.

Los principales líderes opositores habían advertido en los días previos que cualquier llamado a una Asamblea Nacional Constituyente debía ser "desobedecido".

"Si convocan un proceso Constituyente chimbo (de mala calidad), llamo a desobedecerlo", dijo el líder opositor Henrique Capriles la noche del domingo. "No nos van a imponer unas elecciones chimbas. Las elecciones libres y democráticas están plasmadas en la Constitución", agregó.

La oposición asegura que Maduro se ha convertido en un "dictador" que apresa a la disidencia y cercena las libertades y el lunes cumplió un mes de protestas en las calles exigiendo, entre otras cosas, elecciones anticipadas.

Por su parte, el líder socialista sostiene que las protestas opositoras sólo buscan un golpe de Estado en su contra.