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El alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, firmó un acuerdo para recibir una donación de trenes de la operadora ferroviaria estadounidense Caltrain (California). Según expresó el burgomaestre, esta entrega se destinará al transporte público que unirá Lima con Chosica. Sin embargo, existen varios puntos a analizar sobre la utilidad de estas entregas a la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML).
López Aliaga defendió la donación y resaltó que las 19 locomotoras diésel-eléctricas y 90 coches de dos pisos están en perfectas condiciones. Asimismo, negó que estas sean contaminantes y respaldó el pago de US$ 24 millones que se hará para traer las unidades al país.
En entrevista con Canal N, el presidente de Ferrocarril Central Andino, Juan de Dios Olaechea, señaló que al iniciar operaciones, el Tren Lima-Chosica tiene la proyección de transportar a 15 mil personas diariamente. No obstante, con la implementación de una segunda vía se espera incrementar significativamente la capacidad de transporte, alcanzando más de 200 mil pasajeros en un solo día.
Para Antonio Álvarez, experto en temas municipales, existen varias aristas por definir, ya que se trata de una vía que en la actualidad está concesionada por una empresa que es supervisada por el Ministerio de Transporte y Comunicaciones y la cual, para funcionar como se está pensando, se debe pasar por varios caminos.
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Los estatutos y costos
Según Álvarez, hay que tener en cuenta que el alcalde de Lima está gestionando una donación de Estados Unidos para la reorganización ferroviaria del transporte urbano en Lima, esto quiere decir que hasta el momento, no se ha formalizado la aceptación de dicha donación, ya que las gestiones previas están en proceso.
“Una vez que el acuerdo esté aceptado por el Consejo Municipal, recién iniciarán los acuerdos y futuros convenios”, dijo a Gestión.
Sobre los costos de envío, señaló que “es muy usual en Perú que cuando se dona un vehículo que está en otra jurisdicción, quien asume el costo de traslado es quien recibe la donación y al ser un acuerdo internacional es lógico que el flete se incremente”.
“Esta es una donación sujeta a cargo que en nuestro código civil se denomina como donación sujeta a condición porque aún se tiene que terminar el proceso previo que se va a llevar en Estados Unidos con regularización americana para que recién se inicie toda la documentación de traslado al Perú”, explicó.
MML vs. ATU
Un factor clave que hay que tener en cuenta es que la vía férrea que va desde Lima hasta la sierra está concesionada por una empresa privada hasta el año 2039 y al estar sujeta, aplica reglas diferentes.
En ese sentido, Álvarez mencionó que ante este caso, la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU) tampoco tendría injerencia en este proyecto, ya que el único protagonista es el Ministerio de Transporte y Comunicaciones (MTC).
“El MTC es quien supervisa la actividad ferroviaria nacional de la Dirección General de Caminos y Ferrocarriles. Por eso, uno de los retos que tiene este proyecto es que se debe trabajar de manera articulada para que esta obra pueda realizarse”, manifestó.
La concesión
El especialista en temas municipales, señaló también que el tramo que va de Lima a Chosica va a terminar en una concesión porque desde que se inicia a explotar una ruta para darle uso público debe ser manejada por una empresa privada.
“La Municipalidad de Lima no podría económicamente sostener esta obra por los altos costos de mantenimiento, construcción y más por eso esta obra será concesionada y se buscará de forma legal para que el Ministerio de Transportes delegue sus facultades para que cada actor pueda realizar sus funciones y acciones”, expresó.
“Detrás de una llegada de trenes, vagones, locomotores, hay todo un procedimiento técnico complejo que tiene que vencerse y superarse”, añadió.
Sin embargo, Antonio Álvarez mencionó que hay que tener cuidado para no repetir la figura de los peajes en Puente Piedra.
“Lima al no tener cómo sustentar económicamente la instalación de rieles y hacer una vía férrea adicional porque la que se tiene ya está siendo usada por la concesionaria que traslada minerales a la sierra, entonces se deberá recurrir a las empresas privadas y es muy probable que podría repetirse la figura de los peajes en Puente Piedra para recuperar su inversión y buscar su ganancia. Por eso, los acuerdos tienen que ser responsables, proporcionales y sobre todo transparentes”, acotó.
El lado B de los trenes
Por el contrario, Luis Quispe, presidente de la ONG Luz Ámbar, manifestó que es la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU), quien debe tener la supervisión total de este proyecto ferroviario.
“Según la Ley 30900, la Autoridad de Transporte Urbano (ATU) es la entidad encargada de regular y planificar el transporte urbano en Lima y Callao. La Municipalidad de Lima perdió esta competencia, por lo que cualquier iniciativa en transporte urbano ferroviario debe ser liderada o coordinada con la ATU. Por tanto, la compra de trenes por la municipalidad podría estar fuera de su jurisdicción”, sostuvo.
“La adquisición de trenes con más de 40 años de antigüedad por US$ 24.5 millones levanta interrogantes sobre la eficiencia del gasto público, los estándares técnicos y la sostenibilidad del proyecto. En un contexto donde se busca modernizar el transporte, el uso de tecnología obsoleta podría ser contraproducente”, agregó.
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Ante esto, Quispe destacó que “para que estos trenes puedan operar, es necesario contar con infraestructura adecuada (dobles rieles, señalización moderna, horarios de operación). Sin una planificación integral que incluya estudios técnicos y económicos, el proyecto podría enfrentar serias limitaciones”.
En ese sentido, subrayó que, si bien la intención de mejorar el transporte urbano es positiva, es fundamental garantizar transparencia en el uso de recursos públicos y en la implementación de concesiones. Esto incluye consultas públicas, publicación de estudios de factibilidad y auditorías independientes.
Yuriko Cabeza, Lima 1987. Licenciada de la Universidad Inca Garcilaso de la Vega, con más de 12 años de experiencia en medios digitales. Escribo sobre política, actualidad local y realizo informes especiales.
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