El expresidente Pedro Castillo volvió a pedir asilo al Gobierno de México, esta vez desde su reclusión en la sede de la Dinoes donde se acata su detención preliminar.
El canciller de dicho país, Marcelo Ebrard, confirmó este jueves 8 de diciembre que esta solicitud se hizo a través del embajador de México, Pablo Monroy, quien acudió a visitar a Castillo Terrones.
En redes sociales, el secretario de Relaciones Exteriores de México dijo que el embajador encontró bien físicamente al expresidente peruano.
“Castillo ha ratificado la solicitud de asilo recibida en la Embajada de México esta madrugada (2 a.m.) [...] Hemos procedido a iniciar consultas ante las autoridades peruanas”, informó el funcionario mexicano.
Ebrard compartió la carta que recibieron por parte del abogado de Pedro castillo, Víctor Pérez Liendo, donde pide textualmente que consideren otorgar asilo al exmandatario peruano.
“Ello frente a la persecución infundada de órganos de justicia que han tomado un carácter político en sus actuaciones respecto a esa persona, a tal extremo que pretenden procesarlo por meros anuncios de voluntad o intención que no configuran ningún ilícito penal (a lo mucho actos preparatorios)”, se lee en la carta de fecha 7 de diciembre.
Horas antes y en una de sus conferencias de prensa rutinarias, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó que había recibido el pedido de asilo por parte de Pedro Castillo pero que esto no se concretó porque el exmandatario fue intervenido luego de abandonar Palacio de Gobierno.
“Busqué a Marcelo Ebrard para que hablara con el embajador y se abriera la puerta con apego a nuestra tradición de asilo, pero al poco tiempo tomaron la Embajada con policías y también con ciudadanos la rodearon y creo que él [Castillo] no se pudo ni salir, ya lo detuvieron de inmediato”, dijo el presidente mexicano a la prensa.