La Adjunta para los Derechos de la Mujer de la Defensoría del Pueblo, Eliana Revollar, rechazó las frases del presidente del Consejo de Ministros, Guido Bellido, contra la congresista Patricia Chirinos (Avanza País).
En diálogo con RPP Noticias, consideró “especialmente preocupante” las afirmaciones del primer ministro en un país en el que la tolerancia social hacia la violencia contra las mujeres tiene un elevado porcentaje.
“Desde la Defensoría del Pueblo y creo que todo quien tiene instancia de poder, tiene que rechazar todo acto de violencia o discriminación contra la mujer en general y más cuando esta viene de personas que tienen determinado poder, que representan al Parlamento o al Ejecutivo en altos cargos que, precisamente, los llevan a dirigir las políticas públicas”, señaló.
Indicó que a la mujer “no se le puede decir lo que a uno se le antoja”, principalmente con comentarios “que probablemente, ni se entienda la dimensión de lo que lleva consigo”. También insistió en la necesidad de una “lucha férrea, más allá de las tiendas políticas”, para concientizar sobre el respeto a las mujeres.
“El hecho de señalarse a una mujer que ha pasado por todos los estados civiles solamente le correspondería ya ser violada, entendiendo que la violación es un delito reprobable, punible, pero además que es un acto en el cual, aparte de ser perseguido penalmente, da cuenta de ese poder que tienen los hombres para referirse al cuerpo de las mujeres”, subrayó.
“Acá hay una situación grave en la terminología que muchas veces está extendida en la sociedad. La violación se toma como algo normal, no se alza la voz contra ello”, añadió Revollar.
Como se recuerda, la legisladora Patricia Chirinos detalló en RPP que en una conversación que tuvo cuando pedía una oficina a la Junta Preparatoria de la Mesa Directiva ante Jaime Quito Sarmiento (Perú Libre), ocurrió una agresión en su contra por parte de Guido Bellido.
“Digo que por favor quiero que me den esta oficina de mi padre (Enrique Chirinos Soto) y que tengo muchos sentimientos hacia esa oficina. Bellido agarró y me dijo ‘que te preocupas de eso, anda cásate’ y le dije ‘perdón, he sido soltera, casada, divorciada y ahora soy viuda’”, señaló.
“Me dijo ‘ahora solo falta que te violen’. Él me lo dijo directamente. Por supuesto yo respondí, no soy ninguna temerosa ni timorata, pero sí me pareció una falta de respeto grave”, agregó la legisladora.