Óscar Maúrtua fue ministro de Relaciones Exteriores entre el 2005 y 2006, durante el gobierno de Alejandro Toledo. (Foto: Andina)
Óscar Maúrtua fue ministro de Relaciones Exteriores entre el 2005 y 2006, durante el gobierno de Alejandro Toledo. (Foto: Andina)

El ministro de Relaciones Exteriores, Óscar Maúrtua, rechazó el proyecto de ley presentado por legisladores de Perú Libre que, según denunció el Instituto de Prensa y Sociedad (IPYS), amenaza directamente a la libertad de expresión.

Como todo peruano estoy preocupado porque hemos tomado nota del proyecto de ley que se ha presentado en el Congreso”, expresó Maúrtua, quien acompañó al presidente de la República, Pedro Castillo, en la sesión del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA).

Todo eso colisiona con los instrumentos de carácter multilateral, como lo son la Convención de Naciones Unidas Derechos Humanos, que consagra la libertad de expresión, al igual que la Convención Americana de Derechos Humanos, por ende es algo que ciertamente afecta compromisos internacionales y que están inmersos, a su vez, en ámbitos tan puntuales como los derechos humanos, de los cuales, está administración del presidente Castillo, es fundamentalmente solidaria y está muy comprometida”, acotó el canciller.

Asimismo, afirmó desconocer si Castillo Terrones aceptará el pedido del Consejo de la Prensa Peruana (CPP) para firmar la Declaración de Chapultepec y de Salta. El 9 de setiembre, María Eugenia Mohme, presidenta del CPP, y el director ejecutivo, Rodrigo Salazar Zimmermann, se reunieron con el mandatario para expresar la necesidad de respetar y promover las libertades de prensa y expresión en beneficio de la democracia.

Como se recuerda, Congresistas de Perú Libre presentaron un proyecto de ley para declarar de necesidad pública e interés nacional “la justa y equitativa distribución del espectro electromagnético y radioeléctrico en radio, televisión, y otros medios de comunicación, y la transmisión en el territorio nacional”. Iniciativa que ha sido rechazada por diversas asociaciones civiles, IPYS y la Sociedad Nacional de Radio y Televisión (SNRTV).