El Ministerio de Vivienda adquirió almuerzos, postres y hasta suplementos alimenticios con dinero de la caja chica de esa entidad, según reveló “Punto final”.
Entre enero y abril de este año el despacho ministerial Hania Pérez de Cuéllar gastó un aproximado de S/ 1,288.80 en 7 almuerzos para llevar del restaurante Chifa Palacio, ubicado en la cuadra 5 de Canaval y Moreyra.
En diciembre de 2021 dicho portafolio emitió una resolución directoral que delimita el uso de su caja chica. Su finalidad es asegurar, atender y agilizar el pago de gastos menudos y urgentes que demandan su cancelación inmediata, o de aquellos repentinos que no han sido debidamente programados.
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La normativa señala que, en el caso de consumo de alimentos o refrigerios pagados por la caja chica, estos estarán justificados solo cuando se deban a reuniones de trabajo o labores por necesidad de servicio.
El 9 de enero de este año, por ejemplo, el despacho ministerial gastó S/ 185 soles en un Banquete Mandarín y un chancho asado al ajo. La justificación: una reunión de trabajo para preparar la primera exposición de la ministra ante el Congreso en medio del voto de confianza al gabinete de Alberto Otárola.
Asimismo, el domingo 9 de abril de este año, el despacho ordenó comprar dos banquetes Mandarín por un total de S/ 297.80. La justificación: otra reunión de trabajo con funcionarios del Ministerio de Vivienda en dicho portafolio de 12 a 7 de la noche, en medio del problema de las lluvias en Piura.
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Del mismo modo, el 10 de abril se ordenó comprar 10 botellas del suplemento alimenticio Ensure, 5 sabor a vainilla, 5 sabor a café, algunas de las cuales fueron adquiridas en Surquillo. En total, se gastaron S/ 108 y se especificó que la compra se realizaba para consumo del despacho ministerial.
La lista es larga: entre abril y junio de este año, el despacho de Vivienda gastó S/ 1,231 en cuatro almuerzos de una barra criolla ubicada en la primera cuadra de Canaval y Moreyra. El 21 de junio, por ejemplo, el despacho gastó S/ 479.50 en un combo culinario: 2 porciones de ají de gallina, 3 de seco, 3 de rocoto relleno con su respectivo pastel de papa, 1 pastel de choclo, y de postre 6 cremas volteadas con sus 2 litros de chicha morada.
El motivo es el mismo en todos: reunión de trabajo con funcionarios del sector y visitas externas. Aunque hay un detalle, esta última compra se hizo el 21 de junio para una reunión del 22 de ese mes.
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Consumo de más comida
El 17 de mayo, el despacho ordenó comprar nuevamente comida en el chifa Palacio por 439 soles; el 1 de junio, por 366 soles. El 11 de ese mes cambian de chifa, pero no de montos: compran 303 soles en un restaurante de la avenida San Luis.
Además, el 3 de agosto, el despacho pidió a un café ubicado en la avenida República de Panamá, 3 ensaladas, dos empanadas de alcachofa, dos de espinaca y dos porciones de pastel de choclo. El total: S/ 154. La justificación: una reunión con la ministra del Ambiente, Albina Ruiz.
La Unidad de Investigación de Latina Noticias identificó que esto solo se produce en el sector Vivienda. En otros ministerios, como el Midis, Justicia o de la Mujer, los gastos en alimentación están vinculados a compras de insumos en supermercados para preparar los platos en las cocinas de los ministerios.
Ministerio se defiende
En un comunicado el Ministerio de Vivienda señaló que los gastos de caja chica generados cumplen las normas internas y que además se dieron en el marco de reuniones para atender “situaciones de fuerza mayor”.
