Walter Ríos cumple actualmente una orden de 18 meses de prisión preventiva en el penal Ancón I. (Foto: GEC)
Walter Ríos cumple actualmente una orden de 18 meses de prisión preventiva en el penal Ancón I. (Foto: GEC)

Nuevos audios muestran conversaciones entre el empresario Salvador Ricci Cortez, dueño de restaurantes y otrora propietario del hotel María Angola, con John Misha, asistente y chofer del entonces presidente de la Corte Superior de Justicia del Callao, Walter Ríos.

Según ‘Cuarto Poder’, datan del 8 y el 9 de febrero del 2018. El día 8, Salvador Ricci Cortez habló con John Misha sobre las pretensiones judiciales sobre el hotel que tenía la también empresaria Ana Velluttini Rodríguez, a quien se referían como “la tía”.

  • Salvador Ricci: Aló.
  • John Misha: Ya, don Salvador, se cortó.
  • Salvador Ricci: Sí, hermano. Escúchame. Para que le digas al jefe cuando puedas hablarle… Aló, escúchame. Estos no son de Fonafe. Esa tía, hace ocho años –que yo te voy a llevar la documentación para que se la lleves al jefe– compró el Hotel María Angola por 50 mil dólares. ¿Te parece?
  • John Misha: No.
  • Salvador Ricci: Eran las acreencias. La chotearon porque había una cautelar y la chotearon. ¿Entiendes? Entonces, ella, el subterfugio, se han metido donde un juez y el juez ya la choteó.

En agosto del 2009 Ana Velluttini había adquirido, mediante una cuarta subasta realizada por el Fondo Nacional de Financiamiento de la Actividad Empresarial del Estado (Fonafe), las acreencias que desde 1999 mantenía el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) en el hotel María Angola.

El MEF se había convertido en principal acreedor del hotel cuando el Banco Latino quebró y le traspasó su cartera incobrable, incluida la de Ricci. El hotel María Angola entró a un proceso de insolvencia y pasó a ser manejado por una junta de acreedores, y el principal acreedor, con el 65%, era el MEF.

Pero en el 2009, en una cuarta subasta realizada por el Fonafe, el MEF remató esos créditos por 52 mil dólares a la compradora Ana Velluttini. Con este panorama, tal vez por eso Salvador Ricci buscó la ayuda de su amigo Mario Mendoza, un empresario amigo de Los Cuellos Blancos del Puerto.

  • Salvador Ricci: Para que esté tranquilo mi amigo, en esto nos está ayudando, ¿sabes quién? Mario Mendoza, que tú lo conoces. Mario Mendoza es pata y él me está ayudando en eso. ¿Qué pasa? Ellos se han presentado a un juzgado y el juzgado los ha choteado. Y no solamente los ha choteado, sino que no les ha dado la razón en nada. Y han tomado el nombre de Fonafe porque ellos tienen una pretensión de ganarle a Fonafe mis acreencias. Mis acreencias, que son por 10 millones ó 15 millones, ellos con trafa se la quisieron comprar a Fonafe, pero Fonafe los anuló. Estoy hablando del año 2008, hace nueve años o diez años ya. Y ellos, hace dos años se han despertado y han querido meterse de nuevo (…) Yo te voy a dar la documentación.
  • John Misha: Ya, bacán. Nos encontramos ahí, entonces. 1 y cuarto.
  • Salvador Ricci: Nos encontramos entre y 1 y 1 y cuarto, me llamas a las… Yo te voy a dar cien para que almuerces bien por mi cuenta, ¿ya?
  • John Misha: Ya, don Salvador. Ahí estoy, ahí lo llamo.
  • Salvador Ricci: Y dile al hombre que cualquier cosa, cuando lo vea a Mario Mendoza, él sabe la historia, porque él me ha puesto a sus dos abogados al servicio mío, que son, no sé si los conoces, Eduardo Soto.
  • John Misha: Claro, sí .
  • Salvador Ricci: Eduardo Soto, y lo ha puesto a otro que ya es más de peso, Max Herrera.
  • John Misha: Ah, ya, ya, ya.
  • Salvador Ricci: El que está más atento de todo es Mario Mendoza, que me dijo: “oye, estos desgraciados de Wilfredo Chau y la Ana Velluttini, delincuentes, quieren joderte”. ¿Ya?
  • John Misha: Ah, ya, ya, ya.
  • Walter Ríos, el presidente de la Corte Superior del Callao, fue informado de esa conversación por su chofer John Misha. La comprobación es el siguiente diálogo entre ambos.
  • Walter Ríos: John, hazme un favor.
  • John Misha: Dígame, doctor.
  • Walter Ríos: Llámalo al viejo que te fue a buscar al restaurante, al que te dejó los documentos, dile, pues, que como ha dicho “cualquier cosa estoy a tu disposición”, ¿no? Que disculpe, señor, no sé cuánto. Dile que, a ver cómo se porta, que el sábado el “number one” está haciendo su cumpleaños. Él no va a querer ir, no lo invites. Que “solamente quiere un apoyo”, ¿ya?
  • John Misha: Ya.

(…)

  • Walter Ríos: Puede ser una cajita del que compraste ahora, ¿no? Del que compraste, el más más que compraste hoy día. El reserva.
  • John Misha: El reserva, el Protos Reserva.
  • Walter Ríos: Claro. No digas todo, pues, ya tú sabes… “PR”, “PR”, ya, “PR”. O, sino, las azulitas Johny Walker, media docenita.
  • John Misha: Ya.
  • Walter Ríos: Cualquiera de los dos, a ver qué te dice. Para este sábado, dile, para este sábado. ¿Ya?
  • John Misha: Ya.

A Ricci, necesitado de ayuda legal, parece que no le disgustó en absoluto el pedido de Misha cuando le habló de la cercanía del cumpleaños de Walter Ríos.

  • John Misha: El 13 de febrero es su santo de él, y cae día de semana, creo que es jueves. Pero, él, parece que el sábado le están haciendo una pequeña reunión en su casa, creo familiar, así nomás que vienen, familias, así, antes, antes.
  • Salvador Ricci: Claro, ya, ya.
  • John Misha: Entonces, me dice: “dile al amigo, por favor”, me dice: “dile al amigo, por favor, con toda, así, confianza en que estamos, si me puede colaborar con una cajita de vinitos”.
  • Salvador Ricci: Por supuesto, dile que sí, pues, hermano.
  • John Misha: Ya, doctor, le digo, yo le voy a decir. “Por favor, dile a Salvador”, me dice. “Me han avisado que van a venir de visita”. Dice que es un Protos Reserva.
  • Salvador Ricci: Protos Reserva, ya. Yo, ahorita estoy manejando, no voy a apuntar, pero mañana sí. Mañana… que tenga apuntado, o mándame un whatsapp si quieres con la marca para yo conseguirla.
  • John Misha: Ya, está bien.
  • Salvador Ricci: ¿Y para cuándo lo quieres? ¿Para el sábado?
  • John Misha: Sí, pasado mañana.
  • Salvador Ricci: Ya, para pasado mañana. Yo lo consigo.

¿Cómo han favorecido los jueces Hinostroza, Ríos y Ana María Zapata Huertas a Ricci? La respuesta estaría en lo que les ha dicho el colaborador eficaz 010A al fiscal supremo Jesús Fernández Alarcón y a la fiscal suprema adjunta Fanny Quispe Farfán: dilatando el proceso del Expediente 548-2001.

El caso 548-2001 es justamente el proceso en el que se nombró como administradora judicial, en el 2002, a la persona que aparece al lado de Ricci en el video de la celebración por el Día del Trabajo en el Hotel María Angola, Jacqueline Beltrán Villar. La permanencia de Beltrán ya tiene 17 años, según el colaborador.

Salvador Ricci tiene en total 115 llamadas con su amigo Mario Mendoza. 42 con Walter Ríos, sin contar las que existieron con el chofer John Misha. 98 con César Hinostroza. 26 con Ana María Zapata, la jueza que mantuvo el nombramiento de la administradora judicial. Y 14 con José Luis Lecaros, el actual presidente del Poder Judicial, quien es su amigo.

“Yo me siento víctima, me siento víctima ahora que las cosas han avanzado, ahora que tengo mayor conocimiento (…) Víctima del Poder Judicial, víctima de Salvador Ricci Cortez por usufructuar todos los ingresos que pertenecen a los acreedores”, dijo Ana Velluttini.