Con motivo de conmemorarse hoy, 28 de julio, los 201 años de la Independencia del Perú, el arzobispo de Lima, monseñor Carlos Castillo, encabezó la tradicional Misa Solemne y Te Deum en la Basílica Catedral de Lima.
Durante su presentación, habló sobre el exentrenador de la Selección Peruana, Ricardo Gareca, y la campeona mundial Kimberly García.
“Las imágenes actuales de Ricardo Gareca y Kimberly García desbordantes de generosidad, alentadores de nuestra esperanza, pero maltratados por el egoísmo estrecho de intereses equivocados nos reafirman en esta misión porque siguen dejándonos el mismo legado que debemos de expandir hasta las estructuras más amplías de nuestra sociedad peruana”, dijo monseñor.
“Somos herederos de modos de ser humanos muy lejanos a los que nos inducen a la ambición y a la corrupción. El Perú se vio construyendo así. Cualquier otra teoría sobre el Perú como la del terrorismo destructor del Estado o la corrosión egoísta de la corrupción y la ganancia absoluta destruye nuestro Estado, nuestra patria y nuestra historia, y nos desprecia como peruanos”, añadió.
Por último, señaló que como sobrevivientes agradecidos sigamos el camino de Jesús que anticipó mediante signos tangibles el reino del Dios bueno”.
“Que permita generar o quizás regenerar al Perú como una partecita del cielo, sueño preciado de nuestra Rosa de Lima. Felices Fiestas Patrias a todos y todas aquí presentes”, finalizó.
¿Qué sucedió con Kimberly García?
Durante una ceremonia de reconocimiento en Palacio de Gobierno a Kimbery García, presidida por el presidente Pedro Castillo, el mandatario confundió su nombre y la llamó ‘Klimber’.
“Nuestra querida campeona Klimber García. (...) “Hoy es un día más que especial porque tenemos a una campeona en el seno patrio, gracias a la familia y al esfuerzo propio de Klimber”, repitió el presidente en su intervención.
Este hecho no pasó desapercibido en redes sociales, donde usuarios cuestionaron la equivocación del mandatario.
¿Qué es el Te Deum?
El Te Deum, traducido al español como “A ti, Dios”, es un antiguo himno de alabanza y representa una acción de gracias al Todopoderoso. Este ritual religioso marca el inicio de las celebraciones por el aniversario patrio.