
En una ceremonia conmemorativa por los 40 años del sistema Mirage 2000 en la Fuerza Aérea del Perú (FAP), la presidenta Dina Boluarte confirmó oficialmente la compra de una nueva flota de aviones de combate, marcando una de las decisiones más significativas en materia de defensa nacional en décadas.
“Modernizar nuestra flota es clave para garantizar la seguridad nacional, el desarrollo y la capacidad de respuesta ante emergencias. No podemos ser mezquinos con nuestra propia institución y por ende con nuestra propia patria. No retrocederemos en esta tarea histórica que cumpliremos pensando en el Perú”, declaró Boluarte desde la Base Aérea de La Joya, en Arequipa.
La mandataria sostuvo que su gobierno ha asumido “la decisión histórica” de renovar la capacidad operativa de la FAP, luego de años de postergación institucional.
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Tal y como lo adelantó Gestión, el Perú adquirirá 24 aviones de combate multirrol, distribuidos en dos lotes de 12 unidades cada uno. El monto de inversión asciende a US$ 3,500 millones, financiados en dos tramos: US$ 2,000 millones en 2025 y US$ 1,500 millones en 2026, a través de deuda interna ya autorizada por el Congreso de la República.
El primer lote incluirá soporte logístico, armamento y sistemas de entrenamiento, y se exigirá que al menos tres aeronaves estén entregadas antes de julio de 2026, en cumplimiento de una directiva presidencial.

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Postores en competencia
El proceso de selección ha sido gestionado directamente por la FAP y se encuentra en su fase final de evaluación técnica. Según reveló este diario, los tres postores finalistas son:
- F-16 C/D Block 70 (EE.UU. - Lockheed Martin)
- Rafale F4 (Francia - Dassault Aviation)
- Gripen E/F (Suecia - Saab)
Todos los modelos ofrecen capacidades multirrol, radares AESA, aviónica de última generación y compatibilidad OTAN. Sin embargo, la elección dependerá también del paquete de compensaciones industriales (offset) ofrecido al Perú, que incluiría transferencia de tecnología, coproducción y participación de la industria local.
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Proceso gobierno a gobierno
El Ministerio de Defensa ha reiterado que esta adquisición se realizará bajo la modalidad de gobierno a gobierno, con supervisión de la Contraloría General de la República. Se busca evitar cualquier tipo de intermediación privada, tal como se estableció en anteriores procesos de compra en el sector defensa.
Además, el contrato incluirá cláusulas obligatorias de compensación tecnológica e industrial.
En ese sentido, el modelo sueco Gripen E/F ha sido uno de los más destacados a nivel regional por sus acuerdos de producción local, como el realizado con Brasil.
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Renovación de los Mirage 2000
El anuncio de la presidenta se da en el contexto de un homenaje a los aviones Mirage 2000, adquiridos por el Perú en 1985. Estas aeronaves francesas participaron en más de 70 misiones durante el conflicto del Alto Cenepa en 1995 y han operado desde 2012 en labores de apoyo contra el narcotráfico en el VRAEM.
“El legado del Mirage 2000 nos impulsa a mirar hacia adelante y fortalecer nuestras capacidades”, expresó Boluarte.
También señaló que la decisión de compra responde al mandato constitucional del artículo 163, que establece que el Estado debe garantizar la defensa nacional frente a amenazas internas y externas.
“Sin duda que los tres aviones tienen capacidades tecnológicas, es correcto, pero la clave estará en cuál se adapta mejor a las necesidades peruanas”, dijo a Gestión el especialista en temas de defensa e inteligencia, Andres Gómez de la Torre.
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Próximos pasos
Actualmente, la FAP y el Ministerio de Defensa continúan evaluando los informes técnicos de los postores. La decisión final se anunciaría, según fuentes de Gestión, este mes, a más tardar el 31 de julio.
El objetivo, según los altos mandos militares, es que el Perú recupere capacidades de disuasión aérea frente a amenazas regionales, y que su industria pueda integrarse a una red de producción de tecnología de defensa a largo plazo.
“Y recordar que no solo esto es importante, para generar disuasión hay que tener un conjunto de capacidades y también no descuidar lo relativo a las proyectadas compras militares de aviones de transporte y de helicópteros para reforzar las capacidades de rescate, búsqueda y salvamento”, agregó el especialista.