El Comité de Pesca y Acuicultura de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI) manifestó su preocupación al señalar que por tercer año consecutivo no se realizó un crucero de evaluación del calamar gigante o pota, pese a los esfuerzos del persona científico del Instituto del Mal del Perú (Imarpe).
El presidente de la institución, Alfonso Miranda Eyzaguirre, señaló que uno de los problemas que enfrenta Imarpe, que debe atender la nueva administración del sector, es la obsolescencia de los principales barcos de investigación científica, el BIC “Humboldt” y el BIC “José Olaya Balandra”.
“Llevarían más de un año de inoperatividad, un Instituto de Investigación en un país con 3 mil kilómetros de litoral sin naves modernas que hagan una evaluación minuciosa de sus principales especies pesqueras no puede cumplir con su cometido”, comentó.
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Por su lado, Pedro Silva Minga, dirigente de la pesca artesanal de las cooperativas de Paita, afirmó que el pota es el sustento fundamental de la pesca artesanal del Perú y es la materia prima esencial para la industria de consumo humano y recurso hidrobiológico, pues genera 50 mil empleos directos.
“Hemos estado esperando que se hagan cruceros de pota desde el año 2020 y nos hemos enterado que el BIC “Olaya” que estuvo un año parado, tuvo un siniestro del motor en diciembre de 2022 cuando comenzaba su investigación, a pesar de haber tenido una reparación general. Eso es inaudito”, agregó.
Por su lado, Miranda Eyzaguirre señaló que los cruceros de investigación sirven de guía al Ministerio de Producción (PRODUCE) para definir las medidas de ordenamiento y permiten conocer los índices de abundancia, distribución y concentración de la pota.
En el 2022, se han presentado condiciones atípicas en los niveles de abundancia y ubicación de la pota, por lo que es imprescindible contar con naves operativas para su estudio.
El dirigente gremial planteó que PRODUCE se encargue de la construcción de buques de investigación adecuados ya que no se puede tener uno de los más ricos del mundo con mala flota de investigación.
“Una actividad tan importante como la pesquería del calamar gigante no debería tener tres años a ciegas. Imarpe tiene todas las capacidades en su personal y deben contar también con los medios suficientes para cumplir su importante misión”, concluyó.