El ministro del Interior, Mariano González, aclaró que no puede calificar afirmar que fueran ronderos quienes retuvieron a los periodistas de Cuarto Poder Eduardo Quispe y Elmer Valdiviezo, en el distrito de Chadín, provincia de Chota, Cajamarca.
Desde el Callao tras la desarticulación de una banda criminal, el funcionario explicó que tampoco le compete calificar lo ocurrido con el equipo periodístico de América Televisión.
Remarcó que será el Ministerio Público, a través de la investigación a su cargo del caso, el determinará si se trató de un secuestro.
“Quien lo tiene que calificar es el Ministerio Público [lo ocurrido] Nosotros hemos participado todo el tiempo. Lo que no puedo hacer yo es hacer el trabajo que no me corresponde. Es decir, no voy a calificar. Quien tiene que calificar, y quiero que ustedes entiendan es el Ministerio Público. Ya están las autoridades trabajando; además hay un grupo que está tratando de ayudar, un grupo local también para la recuperación de los equipos que también es importante”, mencionó.
Al ser consultado de por qué no se produjo la detención de algunos involucrados, González precisó que, por la dificultad de acceso a la zona, solo se ha podido rescatado a los periodistas.
“Sus compañeros podrán dar una versión detallada de los hechos. Lo que les puedo garantizar que en ningún momento se ha puesto en riesgo su vida. Es una zona, que ellos podrán dar fe, alejada. Ustedes habrán escuchado en los medios de comunicación inclusive algunos ronderos que han desmentido que sean ronderos [los involucrados]. Yo no puedo asegurar si son o no son ronderos, es parte de la investigación. Lo que sí quisiera que ustedes comprendan es que ese hecho está siendo investigado y el motivo fundamental de la Policía en ese momento, póngase en el lugar también de sus colegas, era recuperarlos y tratar de salvarlos y mantener su integridad y eso se ha logrado. Todas las investigaciones que se tenga que hacer, eso va a continuar”, aseveró.
“Era mucha gente, no eran pocas personas. El tema en ese momento póngase a pensar en el lugar y en ese momento era rescatarlos con vida”, añadió.
El ministro del Interior informó que los periodistas aún permanecen en Cajamarca y se preparan para viajar con destino a Lima.
“Lo que se ha hecho es primero recuperar a sus colegas. Era indispensable garantizar su vida e integridad, eso se ha conseguido. Inmediatamente después han llegado a Bambamarca, han realizado un acta y además con participación del Ministerio Público, en un trabajo coordinado, la fiscal que ya tiene el caso a cargo hará todas las investigaciones, pero estamos haciendo el mejor esfuerzo para que se esclarezca y todos los responsables paguen por este delito [...] Están preparándose para viajar”, dijo González.
Afirmó que el Ejecutivo y al jefe de Estado, Pedro Castillo, fueron informados de este caso. “He informado al Gobierno y al presidente y ahora quiero que tengan claro que esto entra a una etapa de investigación y como bien lo ha dicho, en su momento, la Policía y el Ministerio Público es que vamos a llegar hasta las últimas consecuencias y tengan por seguro que esto es un hecho que se tiene que investigar y condenar a los responsables”.
Comunicado de América
“La tarde del miércoles 6 de julio un equipo del programa Cuarto Poder integrado por el reportero Eduardo Quispe, el camarógrafo Elmer Valdiviezo y un conductor de la zona, fue secuestrado por integrantes de las rondas campesinas del distrito de Chadín, provincia de Chota, en la región Cajamarca”, señala el pronunciamiento.
Se agregó que los ronderos les quitaron la cámara y los celulares, y los obligaron a pedir disculpas en televisión nacional por el reportaje sobre la hermana de la Primera Dama emitido en Cuarto Poder el último domingo. “Si eso no ocurría, les advirtieron que sus vidas estaban en riesgo”, añade América TV.
“Ante esta situación, y para proteger la integridad de las personas secuestradas, se interrumpió la programación de América TV para que el reportero Eduardo Quispe leyera una declaración cuyo contenido fue dictado por los ronderos, quienes, como dijimos, lo obligaron a leer. Solo serían liberados si se cumplía con esta exigencia, lo que ocurrió momentos después de la transmisión”, precisó la casa televisora.
América Televisión finalizó señalando que “condena este hecho que representa un grave atentado a la prensa y su deber de investigar e informar sobre temas de interés público y que involucran a las más altas autoridades del país”.