Malú Acosta, Chief Human Resources Officer de CANVIA
Hoy en día, la tendencia de la participación de las mujeres en el sector tecnológico muestra un impacto positivo. Puestos claves en la implementación de nuevas tecnologías como desarrollo de aplicaciones, testing, experiencia de usuario, programadores UX y UI, Scrum Master, Analistas QA, Gestoras de Proyectos, entre otros, han permitido una mayor participación de las mujeres en el rubro, bordeando el 25%. Sin embargo, sigue siendo una de las tasas de participación más bajas a nivel latinoamericano, según Concytec. Asimismo, si entramos a niveles de especialización en determinadas tecnologías, la tasa de participación puede bajar hasta menos del 5%.
En dicho contexto, uno se pregunta, ¿por qué pasa esto? El principal reto de las mujeres para posicionarse en un sector que ha sido dominado por años por hombres suele estar marcado por el bajo interés en estudiar carreras relacionadas a la tecnología. ¿Los motivos? La falta de modelos a seguir, poca o difícil accesibilidad del rubro, la brecha salarial, así como ciertas creencias y estereotipos que no permiten arriesgar a incursionar en carreras STEM (acrónimo en inglés de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), donde solo el 10% de mujeres en el Perú hoy muestran interés en ello. Esto dificulta contratar a mujeres de perfil tecnológico porque cuesta encontrarlas en el mercado laboral. Ello genera una escasez de heterogeneidad en el sector e impide que las soluciones que brindamos tengan una visión más diversa.
A pesar de ello, gracias a las diversas iniciativas de inclusión del sector empresarial en los últimos años, así como el fortalecimiento de emprendimientos liderados por mujeres, han permitido, poco a poco, generar una mayor conciencia. Asimismo, la pandemia trajo consigo una alta demanda de las empresas por iniciar un proceso de transformación digital y desarrollo de nuevas tecnologías; abriendo oportunidades para sumar profesionales capacitadas que fomenten la participación, en mayor medida, de las mujeres en el rubro.
¿Cuál es el camino a seguir? Se debe promover el interés en carreras STEM ofreciendo oportunidades de formación y capacitación para desarrollar habilidades en áreas técnicas y mejorar sus posibilidades de encontrar empleo en el sector tecnológico. Además, conectar con grupos y asociaciones de mujeres que trabajen de la mano con el sector empresarial para abrir puertas, asimismo, ayudarlas con mentorías para empoderarlas en sus habilidades y contribuciones. Finalmente, fomentar la representación de lideresas dentro de la empresa para dar mayor visibilidad y ‘role modeling’ del talento femenino, evidenciando el valor de una empresa más diversa.