Juan José Ramos - Director de Desarrollo del Instituto Carrión
Fue hace más de tres décadas que el proceso de captación de nuevos talentos implicaba procesos sumamente complejos, en los que el papel era el protagonista. El reclutamiento 1.0, como se le dominó, determinaba que los interesados en encontrar un empleo recurrieran a los diarios de mayor circulación para seleccionar diversos anuncios en los que encajase su perfil, para luego imprimir las hojas de vida y depositarlas en las grandes ánforas de las diferentes empresas.
Desde ese entonces, una avalancha de cambios se ha dado en las formas en la que las empresas despliegan sus estrategias para captar a los mejores talentos, lo que ha devenido en lo que hoy en día se le conoce como Reclutamiento 4.0 o Social Recruiting, por el uso intensivo del marketing digital hacia la captación de los mejores perfiles que necesita la empresa o institución.
Tratándose de un proceso clave y estratégico, que le dará a la empresa ventajas competitivas en la gestión y operación de sus diversas áreas, es clave conocer los alcances que tiene esta nueva forma de atraer al mejor talento, en la cual la transformación digital ha permitido que el área de RRHH trabaje de la mano con la de Marketing, a fin de aprovechar distintas herramientas como redes sociales, la comunicación multicanal, el manejo de contenidos, chatbots, inbound marketing, entre otros, para encontrar el talento ideal.
Asimismo, el análisis de grandes cantidades de datos usando Big Data en los procesos de búsqueda de posibles candidatos y la posterior selección de los más idóneos hacen más rápida, precisa y oportuna la toma de decisiones.
El talento es escaso, bajo esta premisa, se entiende que las empresas están en una constante lucha para quedarse con los mejores, por lo que es importante el desarrollo y fortalecimiento de una estrategia de Employer Branding: enamorar al candidato o candidata; así como lograr que las personas que dirigen y operan dichos procesos sean tanto permeables como flexibles al cambio del entorno digital.
El impacto disruptivo de las TIC’s y la digitalización nos reta a mirar permanentemente nuestro entorno y tomar acción. Si estamos atentos a estos cambios es muy probable que la empresa u organización sepa cómo encontrar siempre al mejor talento.