(G de Gestión) Pocas cosas son más valiosas para nuestro marketing personal que el poder dejar siempre un “halo de éxito”; es decir, una estela positiva de nuestra energía en las personas, que les contagie nuestro entusiasmo y pasión por lo que hacemos. Comparto cinco ideas para influir en ese entusiasmo y en nuestra actitud —y, por ende, en la de los demás—, para dejar a nuestro paso un halo de éxito, lo que, orgánicamente, “jala” más éxito.
- Comparta su entusiasmo. “Entusiasmo”, palabra que etimológicamente viene de “estar con Dios”, significa “inspirar a otros con nuestra buena energía, positivismo y confianza (también le podemos decir fe) en que lo que está por venir es bueno y lo será más aún”. Así, el éxito, que es una actitud y una energía basada en la satisfacción personal —y, por tanto, cada uno tiene su definición o fórmula muy propia de qué es—, jala o atrae más éxito, naturalmente.
- Muestre su pasión en positivo. Antes, muchos tenían el hábito de hacerse ver como víctimas: “¡A mí en todo me va mal!”. Incluso existía entre los exitosos el temor de “mostrarse”. La idea es hacer lo opuesto. No digo exhibirnos, sino mostrarnos positivamente en relación con nuestras ideas, metas y visión de futuro. Darnos a conocer sin arrogancia, no desde el ego, pero sí con la energía y fe de que podemos lograr lo que aspiramos, es inspirador.
- Sea enérgico al hablar y al caminar. Recordemos que líderes son también quienes tienen el coraje necesario para atravesar barreras y vencer los retos en el camino hacia sus metas y objetivos. Es esencial, por tanto, evidenciar esa energía al hablar y al caminar. Quien arrastra los pies, siente lástima por sí mismo o emite tres palabras y bosteza no genera un halo de éxito, no contagia energía ni motiva a nadie. Muestre su sonrisa, comparta sus ganas de aprender —desear aprender es lo opuesto a la arrogancia—, y despierte su pasión y fuerza.
- Cambie de perspectiva. La actitud positiva origina cosas positivas e inspira a los demás. Uno no quiere vincularse con personas que ven únicamente el lado negativo o que solo hacen hincapié en conflictos o problemas. Nos inspiramos por quienes se nos acercan con soluciones en la mano o con la disposición de encontrarlas. Mirar el vaso medio lleno y lo positivo de cada reto requiere muchas veces un cambio de perspectiva. Aprender a cambiar de perspectiva y de actitud se logra con práctica y decisión.
- Sea generoso en aceptar y aprobar a los demás. Todos necesitamos de aceptación y aprobación. Pero solemos esperar a recibirlas para recién corresponder. Hágalo diferente: acepte y apruebe a los demás primero —de manera honesta y genuina, por supuesto—. Así, esas personas, sintiéndose bien gracias a lo que han recibido de nosotros, nos devuelven lo que les damos. Y, mientras más damos, más nos regresa. Es un acto de generosidad que paga en halo de éxito.
Es clave recordar que nada es mejor para nuestro halo de éxito que la autenticidad, la corrección y la sencillez con la que nos comportamos en todos los ámbitos de nuestra vida.
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Presidente LHH DBM Perú & LHH Chile y autora de Usted S. A. (21 ediciones). Ha figurado en el top 15 Merco durante 8 años consecutivos. También es LinkedIn Top Voice, speaker, directora de empresas y ONG, y presidente de The SafeStorage Co.
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