Gerente General de SAS Perú
Los recientes hechos en cuanto la administración de las vacunas nos invita a reflexionar y a repensar en la gestión y en las estrategias usadas, proponiendo nuevas ideas y considerando la analítica como herramienta clave para generar nuevas estrategias ágiles, basadas en datos, para optimizar los suministros limitados y tomar mejores decisiones.
Es cierto que la gestión del programa de vacunación COVID-19 es una de las tareas más complejas de la historia moderna. Incluso sin las complicaciones añadidas de administrar la vacuna durante una pandemia, la carrera para vacunar a las poblaciones que más lo necesitan -mientras se mantienen los protocolos de almacenamiento en frío necesarios, se cumplen los requisitos de dosis dobles y se sigue convenciendo a las poblaciones de la seguridad de la vacuna- es abrumadora.
Sólo el almacenamiento y el transporte de la vacuna son ejercicios logísticos complejos que requieren la coordinación entre los gobiernos, los proveedores, el transporte y el almacenamiento seguro de las vacunas desde los fabricantes hasta los lugares de vacunación.
Son en estos escenarios en donde las estrategias ágiles basadas en datos aportan valor, por ejemplo, para identificar la ubicación y concentración de poblaciones prioritarias; monitorear la adecuación relativa de los proveedores capaces de vacunar poblaciones críticas; medir los cambios en los patrones de necesidad y demanda para optimizar las estrategias de la cadena de suministro; y dar seguimiento de la transmisión y eficacia basadas en la comunidad.
Dado que están basados en datos confiables, estos usos de la analítica se pueden aplicar para los programas de vacunación y tomar así mejores decisiones:
1. Monitorear la capacidad de vacunación y los eventos adversos: Será crucial identificar y contratar suficientes proveedores para garantizar un acceso suficiente a las vacunas COVID-19, especialmente una vez que aumenten los suministros. Este control será posible gracias al trabajo en conjunto con las agencias de salud gubernamentales para monitorear la idoneidad de las redes de proveedores de atención médica, un conjunto de habilidades y una base tecnológica que puede proporcionar a las agencias una visión basada en la evidencia de la capacidad de administración de vacunas y los objetivos de vacunación.
2. Optimizar las estrategias de la cadena de suministro: Se solicita a las agencias de servicios humanos y de salud que asignen el suministro de vacunas en función de una variedad de factores complejos e interrelacionados que incluyen las poblaciones atendidas y la capacidad de los proveedores para almacenar y refrigerar. La optimización de estas estrategias de distribución -mientras se enfrenta a suministros fluctuantes, la necesidad cambiante y las inscripciones de proveedores cambiantes- requerirá un enfoque sólido de datos y análisis. .
3. Analizar la administración de dosis: Existen diversas soluciones de gestión de datos que pueden ayudar a las agencias a crear un registro de vacunación consolidado y confiable. Esto incluye la automatización de procesos tediosos y manuales, como la preparación de datos, la integración de datos y la resolución de entidades para proporcionar a los analistas más tiempo para los esfuerzos de tratamiento y vacunación. Con estos datos de vacunación conciliados, se puede proporcionar análisis para ayudar a las agencias a:
· Predecir la evolución de las necesidades de recursos en jurisdicciones como estados, regiones y países para optimizar las estrategias de asignación.
· Monitorear la aceptación para ayudar a asegurar la alineación con la necesidad anticipada, las solicitudes de los proveedores y las distribuciones de vacunas.
· Analizar brechas inesperadas en la administración de vacunas para orientar los esfuerzos de divulgación y participación.
· Anticiparse a las barreras para administrar segundas dosis.
· Obtener información sobre los cambios en la susceptibilidad, la tasa de transmisión, el estado de inmunidad de la población, etc.