
El rebote que la economía peruana ha estado registrando se ha visto reflejado en una ligera mejora de la población económicamente activa (PEA) a nivel nacional, pues creció 0.8% en el segundo trimestre de este año, respecto del mismo periodo del 2024, según el INEI. Este resultado contrasta con el comportamiento del PBI, que creció 2.9% en abril-junio, frente al segundo trimestre del año pasado, aunque sirve para constatar que el empleo demora en reaccionar a repuntes económicos –sobre todo si el repunte es relativamente modesto, como está ocurriendo en el país–.
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Lo paradójico es que la población económicamente no activa (No PEA) se incrementó más (2.1%), pese a que equivale a la tercera parte de la PEA. En cifras absolutas, la PEA aumentó en 148,500 personas, mientras que la No PEA lo hizo en 167,600. Eso significa que, al segundo trimestre, se sumaron a la economía nacional más personas en edad de trabajar pero sin empleo y sin estar buscándolo, que las que ingresaron al mercado laboral, ya sea empleadas o buscando “chamba”.
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Otros dos datos merecen atención. El primero es la “tasa de actividad”, que el INEI define como la proporción de la población en edad de trabajar que participa activamente en el mercado laboral, ya sea trabajando o buscando empleo. Ese indicador fue 69.9% en el segundo trimestre, inferior en 0.3 puntos porcentuales al del mismo periodo del 2024. El otro dato tiene que ver con la informalidad laboral, que si bien disminuyó 0.4 puntos porcentuales (a 70.7%), en el periodo anual terminado en junio de este año, frente al terminado en junio del 2024, se incrementó 0.5 puntos porcentuales en las empresas de menor tamaño (de 1 a 10 trabajadores).
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Además de la incidencia de la informalidad en las micro y pequeñas empresas, la duplicidad de empleos también es un grave problema. Según un informe de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), 3.8 millones de personas tuvieron una “segunda chamba” el año pasado, principalmente porque necesitan cubrir el presupuesto familiar o el pago de deudas. Ese número equivale al 21.2% de la PEA nacional. El 89% de dichos trabajadores pertenece al sector informal.
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Por último, un problema que se está intensificando: la emigración. Un informe del INEI publicado en enero, da cuenta del fuerte aumento del número de peruanos que salieron del país y no regresaron en por lo menos un año. La cifra del 2023 (el año de la recesión) fue 278,700, muy por encima del pico registrado ese siglo (202,000, el 2007) y 2.4 veces superior a la del 2019. Más de la mitad, fueron personas entre 30 y 64 años de edad.