VENEZUELA. Pese a la contundencia de las pruebas presentadas el año pasado por María Corina Machado y Edmundo González Urrutia sobre los resultados de la última elección presidencial venezolana, que confirmaron una victoria contundente del exdiplomático sobre Nicolás Maduro, este último planea de todos modos asumir la presidencia mañana. Lamentablemente, si logra hacerlo sin demasiada oposición dentro y fuera del país y consigue así acentuar su poder rumbo a un nuevo periodo, la lucha por un eventual fin de la dictadura se tornará aún más difícil y costosa.
Si bien era esperable que la dictadura no acepte los resultados electorales –pese a haber eliminado en su momento a candidatos opositores importantes, como la propia Machado y Henrique Capriles–, el que Machado y González hayan logrado reunir y publicar para todo el mundo el 85.18% de las actas de votación, significó un golpe para el régimen que este no se esperaba. Sobre todo, porque Maduro nunca fue capaz de publicar alguna prueba en contrario. Y peor aún, cuando lo intentó, quedó en ridículo, ya que afirmó que el chavismo habría alcanzado el 51.2% de los votos con 5.2 millones de votos, mientras que González el 44.2%, con apenas 2.4 millones de votos, lo que estadísticamente es casi imposible: si uno va más allá del primer decimal, solo encuentra ceros.
Lo más preocupante de la insistencia de Maduro en asumir pese al evidente fraude, es que es muy probable que lo logre. Y no pacíficamente. Hasta el cierre de esta edición, González había afirmado que viajaría a Venezuela para asumir él la presidencia mañana, pero la dictadura ya ha hecho saber que piensa arrestarlo apenas pise el país. Además, ha anunciado que desplegarán cerca de 1,200 efectivos de la Dirección General de Contrainteligencia Militar en todo el país para controlar las previsibles marchas.
El endurecimiento del régimen y el miedo de Maduro por lo que pueda pasar ha llegado a tal punto que, el martes, se llevó a cabo una nueva ola de detenciones contra activistas y políticos opositores. Esto incluyó al yerno de González, al excandidato presidencial Enrique Márquez y al activista por los derechos humanos Carlos Correa, así como a cuatro ciudadanos peruanos.
Machado ha convocado a los venezolanos a las calles para manifestarse contra el régimen desde hoy, por lo que se esperan marchas multitudinarias. Por el bien de Venezuela y de toda la región, pues lo que ocurra por allá finalmente nos impacta a todos, el apoyo a estas protestas y a los defensores de la democracia venezolana seguirá siendo crucial en los próximos meses. Si bien la posibilidad de un cambio se sigue viendo lejana, en caso Maduro triunfe sin mayores obstáculos, su régimen se habrá acentuado más que nunca.
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