
La reciente aprobación de la Ley N.° 32431 representa un paso decisivo en la protección de los derechos laborales en el Perú. La norma precisa, sin margen de duda, que es nulo cualquier despido que tenga como motivo el diagnóstico de cáncer, su tratamiento o los efectos derivados de la enfermedad. Se trata de un avance importante, pues si bien antes era posible encuadrar estos casos dentro de la categoría de discriminación, la falta de claridad dejaba espacio para interpretaciones restrictivas.