Gerente de Alternativos y Análisis de Prima AFP
¿Cómo cambiarían las decisiones empresariales si realmente se considerara al medio ambiente en cada una de ellas? Hace unos días, Apple introdujo al mercado su primer producto carbono neutral y presentó un video con la Madre Naturaleza participando de la reunión del área de Responsabilidad Corporativa de la compañía. En las imágenes se le rendía cuentas a la naturaleza sobre la meta de carbono neutro al 2030 y las diversas iniciativas que vienen. El video concluye con Tim Cook, CEO de Apple, comprometiéndose a que todos sus productos tendrán impacto climático cero al final de esta década.
Este video ha generado diversas reacciones en el mundo. Hay quienes lo consideran una pieza brillante de marketing, pero al mismo tiempo ha recibido numerosas críticas, desde los que lo tildan de greenwashing*, hasta quienes lo han descalificado por vergonzoso. Lo cierto es que han presentado de manera creativa el trabajo que han realizado en temas ambientales. Pese a que lo reportado en el video incluye hitos y compromisos importantes que hay que valorar, también deja de lado el comentario sobre aspectos fundamentales como el uso de materiales reciclados en sus productos (salvo el aluminio), el diseño de productos que se puedan reparar o sobre la extensión de la vida de estos. Si bien es cierto que Apple reporta avances sobre estos temas en su “Environmental Progress Report 2023″, aún es un trabajo en progreso.
La presentación de Apple coincidió con una actualización del marco de límites planetarios, realizada por el Instituto Potsdam, los cuales tienen como objetivo describir un conjunto de nueve procesos ambientales críticos que son esenciales para la estabilidad y la resiliencia del sistema de la Tierra. En el reajuste se encontró que seis de los nueve han sido transgredidos. Estos son el cambio climático, la deforestación, la pérdida de biodiversidad, la cantidad de productos químicos sintéticos, la escasez de agua dulce y el equilibrio del ciclo de nitrógeno.
Todo ello sugiere que la Tierra está ahora fuera del espacio operativo seguro para la humanidad y visibiliza la urgencia de que las empresas consideren su impacto en el medio ambiente como un problema cercano.
La presión en los procesos transgredidos está aumentando debido a los patrones de consumo y a la constante explotación de los recursos. Por este motivo es vital contar con productos que tengan una vida útil larga y cuenten con un proceso productivo y comercial que priorice la circularidad, tema que Apple, por ejemplo, aún no resuelve del todo.
En un mundo en el que seis de los nueve límites planetarios se han sobre pasado, es crítico que las compañías consideren los impactos al medio ambiente en sus decisiones y que sean transparentes en sus comunicaciones, tanto en los avances que vienen realizando como en sus tareas pendientes en esta materia.
* Greenwashing se puede definir como el brindar una idea falsa o una verdad a medias sobre cómo los productos o servicios impactan el ambiente.