Experta en Reforma Normativa
A diferencia de una empresa, las entidades públicas no pueden conceder bonificaciones a sus mejores colaboradores cuando cumplen una meta o proponen alguna mejora que ayuda a alcanzar un objetivo; y de alguna manera tiene sentido, porque un servidor público está llamado a cumplir con su función, es su deber para que el Estado funcione.
Sin embargo, esta lógica es incompatible con la naturaleza humana. El ser humano, por naturaleza, compite y busca reconocimiento. Por eso, los premios y reconocimientos se han utilizado durante mucho tiempo para estimular a individuos y grupos a alcanzar sus objetivos. A nivel internacional, los gobiernos son más propensos a emplear los reconocimientos debido a su potencial para inducir ciertos comportamientos, como la recuperación económica o promover la innovación.
En el Perú, Ciudadanos al Día ha sido una iniciativa privada que desde hace años reconoce el trabajo de las entidades públicas en brindar mejores servicios al ciudadano y alcanzar mayores estándares de gestión pública. Pero, este reconocimiento no proviene del propio Estado. Si bien el reconocimiento que puede otorgar un privado es importante, el reconocimiento entre pares también lo es.
El 23 de noviembre pasado se realizó la ceremonia de premiación del Segundo Concurso de Buenas Prácticas Regulatorias desarrollado por el Departamento Nacional de Planeación de Colombia (DNP), con el apoyo de la Corporación Andina de Fomento – Banco de Desarrollo de América Latina (CAF). Durante varias semanas, expertos colombianos e internacionales en temas de mejora regulatoria evaluaron las prácticas adoptadas por las entidades del Estado a nivel del Poder Ejecutivo y municipalidades y permitieron que estas entidades pudieran exponer su trabajo y resultados.
El DNP entendió que para impulsar estas buenas prácticas de toma de decisiones normativas era importante promover una sana competencia entre entidades y reconocer las mejores iniciativas. Son muchas las propuestas que pueden destacarse y replicarse en nuestro país, varias se apoyan en el uso de nuevas tecnologías, por ejemplo, el uso de aplicativos y redes en procesos de consulta pública para recabar información, análisis de datos para identificar el impacto de una norma en la competencia. También existen ejemplos de buenas prácticas de organización interna enfocados a desarrollar mejores procesos de toma de decisiones que han tenido un impacto importante en el trabajo de municipalidades.
Estos reconocimientos no solo motivan a estas entidades a hacerlo mejor y competir el próximo año, sino que también refuerzan esta nueva forma de tomar decisiones, y pueden servir de inspiración para nuestro país. Hay mucho que se ha hecho en el Perú y que todavía está invisibilizado. Que lo bueno se resalte y se difunda, para que sea replicado.