Alberto Morisaki
Gerente de Estudios Económicos y Estadísticas de la Asociación Automotriz del Perú
El financiamiento, en todas sus formas, es el motor del crecimiento económico de un país y el acceso a mayores oportunidades de desarrollo para los ciudadanos. Teniendo en mente eso, es también uno de los elementos que impulsa la venta de vehículos y promueve que el país pueda contar con un parque automotor moderno. De esta manera, a través del financiamiento formal ofrecido por diversas instituciones, muchas familias y empresas pueden adquirir un vehículo nuevo, generando una serie de beneficios, tanto particulares (mayor comodidad y seguridad a las personas para transportarse o como herramienta de trabajo, y activo para las empresas) como para la sociedad en su conjunto (menos contaminación, siniestros de tránsito, congestión, entre otros beneficios).
No obstante, lo anterior, el volumen de créditos vehiculares en el Perú es bajo en comparación con otros países de la región. Así, mientras en el Perú sólo alrededor del 35% de vehículos livianos se adquiere a través de financiamiento, en Chile ese porcentaje llega al 80% y en México al 60%, lo cual evidencia claramente que existen oportunidades de mejora que permitan un mayor acceso al mercado financiero.
Contar con un sistema de garantías mobiliarias funcional y eficiente podría ser un elemento dinamizador del financiamiento vehicular. A pesar de que en setiembre de 2018 se publicó el Decreto Legislativo N° 1400, una norma ágil y dinámica, que dispone la creación del Sistema Informativo de Garantías Mobiliarias (SIGM) en sustitución del actual régimen regulado por la Ley N° 28677, a la fecha no se ha producido el cambio. Y es que, a pesar de que este cambio normativo instaurará un gran avance en la estructura y dinamismo de la referida institución jurídica, aún no entra en funcionamiento, puesto que el Decreto Legislativo N° 1400 establece que el nuevo Régimen de Garantías Mobiliarias entrará en vigencia a partir del día hábil siguiente del funcionamiento de la base de datos del SIGM, el cual aún no se ha desarrollado.
En pocas palabras, el cambio está detenido por inacción de las autoridades, y por lo tanto los beneficios del nuevo régimen no pueden ser aprovechados.
Una medida que definitivamente dinamizaría el mercado financiero para la adquisición de vehículos es la facilidad para la constitución de garantías mobiliarias, y la Ley y su Reglamento existen, pero no ha sido implementada, siendo necesario que ello ocurra a corto plazo a fin de impulsar la venta de vehículos con financiamiento que impulse y motive la participación de los entes financieros, y de esa manera contribuir a la modernización del parque vehicular peruano con los beneficios para la economía que eso significa.
En ese contexto, miremos las cifras, al cierre de enero de 2023, la cartera de créditos vehiculares otorgados por las empresas del sistema financiero a las familias peruanas fue S/ 3,885 millones, monto mayor en 15.4% respecto a enero del año anterior, y en 3.6% con relación a febrero de 2020, un mes prepandemia. Este desempeño positivo responde a la recuperación del empleo e ingresos, y por ende del consumo en el país luego de las medidas de confinamiento que se dictaron en el país, en una coyuntura de aumento de la presencialidad y necesidad de movilizarse.
Para lo que resta del año, esperamos que el financiamiento vehicular cierre con una tasa de crecimiento positiva, aunque la misma sería menor a lo observado en los últimos meses. Un comportamiento que respondería a la ralentización del consumo privado, el cual se incrementaría menos desde el segundo semestre del 2022 en comparación al primero, debido a que la recuperación económica estaría perdiendo fuerza por la coyuntura de inestabilidad que vive el país, elevada inflación y un mercado laboral precario. Del mismo modo, el aumento de la tasa referencial del Banco Central durante el último año, la cual busca anclar las expectativas inflacionarias, viene encareciendo el costo del crédito, lo que limitará la demanda por financiamiento. Si, nuestras autoridades tomaran la decisión de destrabará la creación del Sistema Informativo de Garantías Mobiliarias (SIGM), podríamos tener mejores resultados estadísticos, pero, sobre todo, la economía del país y de las familias peruanas podrías ser las mayores beneficiadas.