Jim O’Neill, el destacado economista que acuñó el conocido acrónimo BRIC para referirse a los mayores mercados emergentes, insta a Brasil a combatir la inflación, al tiempo que advierte que la Reserva Federal debería ser prudente en su endurecimiento.
Con la guerra de Ucrania estimulando un repunte de los precios del petróleo, el execonomista de Goldman Sachs Group Inc. dijo que combatir la inflación debería ser una “gran prioridad” para Brasil.
Dado su historial de aumento de los precios al consumidor que terminó en hiperinflación en 1990, no lograr controlarlos sería el mayor revés para la economía en años, afirma.
“Es extremadamente importante que Brasil no permita que reaparezca una inflación significativa de forma permanente”, dijo O’Neill en una entrevista en video el 4 de marzo. “La razón por la que incluso lo puse en los BRIC es porque pensé que Brasil se tomaba en serio el intento de controlar la inflación”.
El banco central de Brasil ha implementado uno de los ciclos de endurecimiento más agresivos del mundo, elevando las tasas de interés en 875 puntos básicos en el último año. Aunque se prepara a desacelerar el ritmo y poner fin a las alzas en los próximos meses, el repunte de las materias primas está llevando a los operadores a preguntarse si los responsables de la política monetaria mantendrán el rumbo.
La inflación se sitúa en el 10.4%, por encima de la meta del 3.5%, y las previsiones de los economistas y las tasas de equilibrio están en alza.
En Estados Unidos, por su parte, el banco central debería tener cuidado con los aumentos de tasas, ya que las condiciones financieras ya son muy ajustadas debido a la guerra de Ucrania, que disparó las primas de riesgo en todo el mundo.
O’Neill, que actualmente es presidente de Northern Gritstone, una empresa de inversión fundada por las universidades de Leeds, Manchester y Sheffield, dijo que la Reserva Federal probablemente tiene “muy poca confianza” en sus próximos pasos mientras se desarrolla la guerra de Ucrania.
Las apuestas en los mercados de futuros descuentan alrededor de 140 puntos básicos de endurecimiento en Estados Unidos este año, comenzando con un alza de un cuarto de punto este mes, lo que marcaría la primera subida de tasas desde 2018.
“El endurecimiento de las condiciones financieras es tan duro que deberían tener cuidado con el grado de ajuste que persiguen”, dijo el economista británico.
Estos son otros puntos destacados:
Rusia
- “A menudo me hicieron creer que Putin era un estratega brillante”. Pero tras el inicio de esta invasión, “la evidencia sugiere que no lo es”
- Es muy difícil para Putin y Rusia mantener aliados dada su debilidad económica
- El congelamiento de las reservas del banco central es “una enorme medida” y tendrá profundas consecuencias para el orden monetario mundial
- “Los BRIC como club político nunca han logrado nada. Es muy decepcionante”
América Latina
- Las economías latinoamericanas se ven afectadas por la “maldición de las materias primas”: les va bien cuando suben sus precios y se desploman cuando caen
- Brasil necesitaría reformas para impulsar las inversiones no relacionadas con las materias primas y aumentar el ahorro interno para romper el ciclo
- “El precedente no es bueno”, dijo O’Neill sobre las perspectivas de que Argentina estabilice su economía tras el acuerdo con el FMI. “No estoy muy esperanzado de que otro acuerdo del FMI resuelva los problemas”
- Incluso Chile, que hasta hace cuatro años habría sido quizás el único ejemplo positivo en América Latina, enfrentará “enormes problemas” debido a temas vinculados a la igualdad, dijo el economista
- “¿Por qué a América Latina le resulta tan difícil salir de esta trampa del ingreso medio? Es realmente extraordinario”
Elecciones en Brasil
- O’Neill dijo que mantendrá la “mente abierta” sobre la economía brasileña si el izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva regresa al poder en las elecciones presidenciales de octubre
- Lula, que estuvo en el poder entre el 2003 y 2010, fue una gran sorpresa positiva, ya que se tomó muy en serio la lucha contra la inflación en su primer mandato, aunque dejó la presidencia con una inflación creciente y un aumento del gasto público, lo que fue “más decepcionante”