Rusia gastará hasta 1 billón de rublos (US$ 10,018 millones o 8,906 millones de euros) del Fondo Nacional de Bienestar, que se nutre de los ingresos del petróleo y es una especie de hucha para malos momentos, para comprar acciones de empresas rusas afectadas por las sanciones occidentales.
El documento fue firmado por el primer ministro, Mijaíl Mishustin, el pasado sábado, indicó la agencia oficial rusa TASS.
El jefe de Gobierno ordena al Ministerio de Finanzas de Rusia “a efectuar en el 2022 la adquisición de acciones de emisores rusos a expensas del Fondo Nacional de Bienestar por un monto de hasta 1 billón de rublos en las condiciones determinados” por la institución.
La Bolsa de Valores de Moscú permaneció cerrada ayer y hoy debido al impacto de las sanciones occidentales por la invasión de Rusia en Ucrania, por lo que aún se desconoce la reacción del mercado.
Así Rusia evitó durante al menos dos días un batacazo mayor como el que sufrió el índice MOEX el jueves pasado en respuesta al anuncio de Rusia de que lanzaba una ofensiva militar contra Ucrania y las primeras sanciones contra el mercado financiero y la deuda soberana.
La Bolsa se desplomó entonces un 45% y los principales valores cayeron más del 58%.