El Gobierno de Noruega reafirmó este miércoles en Brasilia su compromiso ambiental con la Amazonía brasileña y anunció que ayudará a buscar recursos adicionales con otros donantes para mantener la selva en pie.
El anuncio se dio durante un encuentro que la ministra brasileña de Medio Ambiente, Marina Silva, tuvo con su homólogo noruego, Espen Barth Eide, en el que analizaron detalles del Fondo Amazonía, mecanismo creado por Brasil hace 15 años para ayudar a resguardar al bioma y del que el país europeo ha sido el principal colaborador.
Tras el encuentro, la ministra señaló ante la prensa que un paquete de 14 proyectos de desarrollo sustentable financiados con recursos del Fondo que habían sido paralizados durante el Gobierno de Jair Bolsonaro tendrán prioridad.
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“Cumplimos 15 años de trabajar en el Fondo Amazónico que inventó Brasil (...). tuvimos que frenar nuestra labor en 2019 por un cambio de políticas pero estamos muy contentos de volver a trabajar con el presidente Lula (Luiz Inácio da Silva) y con Marina Silva”, aseguró el ministro noruego.
“Seguiremos trabajando de cerca y además de seguir dando nuestro soporte vamos a movilizar a otros donadores para que se unan (a la causa)”, agregó.
Los proyectos están relacionados con acciones para frenar la deforestación del bioma, impulsar actividades de bioeconomía y brindar seguridad alimenticia y protección a indígenas, y son apenas el inicio de otros más que serán presentados, según Silva.
En el encuentro con la prensa la ministra reiteró que los temas relacionados con el cambio climático son una prioridad para el actual Gobierno y dijo que el país debe mirar hacia las energías limpias, aspecto que fue compartido por su homólogo.
“Necesitamos una transición energética y debemos empezar a trabajar en ello desde ya”, aseguró el ministro noruego.
El Fondo Amazonía fue creado en 2008 y funcionó hasta 2019, cuando el Gobierno de Bolsonaro decidió desactivarlo, en medio de la implantación de políticas que impulsaron la minería y otras actividades económicas en la región.
Lula, quien asumió el poder el 1 de enero, derogó esas políticas en su primer día de Gobierno y determinó la reactivación del Fondo Amazonía, al que ahora quiere atraer también a Estados Unidos, China y Francia, entre otras potencias económicas.
Actualmente, el Fondo Amazonía cuenta con unos 1.000 millones de dólares aportados por Noruega y Alemania, y la expectativa es que Estados Unidos se sume con una donación inicial de 50 millones de dólares.
Fuente: EFE
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